Never Be The Same

Capítulo 7

Lauren mantuvo la vista concentrada en un punto fijo sobre la moqueta de la sala y apretó el teléfono en su mano con algo de ansiedad mientras esperaba a que la voz del otro lado de la línea cesara. Sabía que aquella llamada llegaría, pero no esperaba que sucediese tan pronto, aún no se sentía preparada para regresar.

-¿Jauregui? ¿Sigue ahí?.- La ojiverde pestañeó repetidas veces antes de aclararse la garganta para hablar.

-Lo hago sargento.

-Como le decía. Tenemos un informe psicológico en perfecto estado, tal vez pueda unirse a nosotros dentro de los próximos días. La infantería necesita de buenos instructores, y aunque le llevaría un par de días ponerse en forma, no veo porque no pueda encargarse de los nuevos cadetes.

Tomó una respiración profunda mientras pensaba en todas las razones por las que no podía negarse a la petición del ilustre sargento Ross Wilson.

-Estoy de acuerdo señor.- Dijo la soldado- Sería un honor regresar al cuartel dentro de poco.

-Eso es estupendo soldado. Parker y tu son parte de nuestro mejor equipo de militares en la unidad médica.- Matt también regresaría, pensó- El Coronel Webber la esperara dentro de dos días.

La llamada finalizó luego de una cordial despedida por su parte, permaneció de pie en la sala mirando a través de la gran ventana de corredera que daba salida a un balcón. Estaría de vuelta dentro de dos días y aunque sabía a la perfección que se trataba de su deber, no podía evitar pensar en sus enormes deseos por no asistir. Dinah, quien había oído parte de la conversación se acercó a ella con una expresión de preocupación en el rostro.

-¿Te irás otra vez?.- Preguntó la rubia algo temerosa de la respuesta, pues sabía lo difícil que eso resultaba para su hermana.

-No.- La cirujana la tranquilizó con una ligera sonrisa- Sólo trabajaré en el cuartel con la infantería. Nada nuevo ni complicado.

-Aún así, no me gusta.- Aseguró Dinah con el ceño fruncido.

-Es mi trabajo Dinah. Lo sabes.

-Esa frase.- Dijo la rubia soltando una risita sin ánimos- La escuché salir por años de los labios de papá.

Lauren vio a su hermana por algunos segundos antes de que ésta murmurase un 'Buenas Noches' para dejar la sala segundos después. La noche cayó oscureciendo el departamento tan sólo unos minutos más tarde mientras ella permanecía recostada en el sofá con un brazo cubriendo sus ojos. No notó cuando el sueño la venció, y estuvo sumiéndose en tormentosos recuerdos que parecían más reales que cualquier otra cosa. Removiéndose en su lugar con alaridos desesperados escapando de su garganta mientras en aquella realidad creada por sus recuerdos en combate detonaban estruendosas bombas y disparos.

-¡Sal de ahí Mani! ¡Derek!

-¡Lauren!.- Dinah veía asustada a su hermana mientras intentaba despertarla- ¡Lauren, despierta!

Los ojos de la soldado se abrieron de par en par mientras se incorporaba de golpe con la respiración agitada y gotas de sudor rodando por su nuca. Su mirada aún algo desorientada vagó por la habitación hasta dar con Dinah quien estaba sentada justo junto a ella dando leves caricias en su espalda con la palma de su mano.

-¿Quieres un poco de agua?.- Preguntó.

-Sí......- Susurró Lauren mientras frotaba su rostro con ambas manos.

Las imágenes de esos duros momentos en combate dejaron de atormentarla luego de un rato y pudo respirar con más tranquilidad. Dinah procuró hacerle compañía por el resto de la noche y aunque ella dijo que estaba bien en reiteradas ocasiones, dejó de resistirse y aceptó la compañía de su hermana quien cayó rendida sobre su hombro poco después. A la mañana siguiente dejó el departamento para correr un poco, necesitaba algo de ejercicio para lograr despejarse y Matthew la acompañaría.