Capítulo 11

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El sudor escurría por su camiseta mientras continuaba con las flexiones intentando superar en número a las que había realizado los días anteriores. Tenía los brazos acalambrados y sentía que se desplomaría contra el suelo en cualquier momento, tomando respiraciones profundas continuo con el ejercicio clavando los ojos en un punto fijo.

-Es suficiente soldado. Puede descansar.- La voz del Coronel Webber interrumpió su destreza- Es una orden.

Con la respiración agitada y el sudor descendiendo por su rostro y torso, la pelinegra se detuvo incorporándose y disculpándose de inmediato con su superior.

-Lo siento Coronel.

-No te disculpes, has demostrado mucho en estos días Jauregui.- Le tendió una toalla- He hablado con el Mayor Jauregui hace unos días.

Lauren frunció el ceño ante la mención de su padre pero aún así no emitió palabra alguna hasta que el Coronel terminase de hablar.

-Ha llamado para asegurarse de que todo marcha bien con tus entrenamientos y tú desempeño con la infantería.

-Le agradezco a mi padre al preocupación señor, pero no me gustaría que aquello pusiera en duda su opinión respecto a mi desempeño junto a la infantería o incluso con el pelotón.

-Por supuesto que no.- Dijo Webber de inmediato- ¿Debería?

-No señor.- La soldado estaba poniéndose algo incómoda con aquella situación algo abrumadora.

-¿Pesadillas o alucinaciones tal vez?

-¡Estoy bien!.- No había sido su intención alzar el tono de voz pero la presión que aquella conversación estaba impartiendo es demasiada- Lo siento.

Sus ojos se cerraron con fuerza y pasó ambas manos por su rostro intentando tranquilizarse así misma.

-Lauren, puedes decirme. No estoy juzgándote.- Hubo suspiró por parte de la cirujana antes de que le hiciera frente a su superior.

-Pesadillas.

-¿Sobre qué? ¿A qué momento te hacen regresar?.- El Coronel estaba asegurándose de indagar a fondo- ¿La retención del pelotón por parte de los rebeldes?

-No, es.......- Se sentía aún ma sudorosa que hace algunos minutos mientras rápidas imágenes venían como fugaces recuerdos a su mente- Es respecto a uno de nuestros rescates justo antes del ataque por parte de los rebeldes.

-¿Qué exactamente?

-Una explosión.- Lauren se rindió ante sus recuerdos y les permitió salir a la luz- Estábamos evacuando a algunas familias de un edificio en medio de un tiroteó.

-¿Tú y quién más?.- Webber no cedería hasta que ella relatase toda la historia.

-Reynolds y Kordei.- La soldado se estremeció un poco al nombrar a su amiga- Hubo una niña atrapada y ellos regresaron al interior. Traté de detenerlos pero Reynolds fue un necio y arrastró a Normani con él.

La voz de la ojiverde se rompió durante el relato y entonces Dennis Webber obtuvo lo que quería, dar justo con aquello que atormentaba a la cirujana de traumas. Le parecía muy extraño su pronta recuperación, pero como a él le había ocurrido innumerables veces, creía que se podía deber a que la soldado estaba bloqueando su dolor y tormento para permanecer fuerte.

-Y luego explotó el edificio.- Concluyó el Coronel.

-Así es.- Susurró Lauren.

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