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Muy pronto, los muchachos llegaron, tarde por solo una hora. Entraron después de dos golpes rápidos, Sofía apenas se había apartado, soltándome del mostrador. Una mirada penetrante entre mí y su delicada disculpa fue compartida.

Saludó a los dos, ofreciendo un abrazo. Thomas siempre ha sido rígido, sin embargo, se adelanta para abrazarla y saludarla. Cameron no dio más que un abrazo lateral. Él no parece estar del todo bien, pero ¿Alguno de nosotros lo está?

Lentamente, rodeé el mostrador en forma de L y me incliné a través del espacio entre el gabinete, mi cabello cayó sobre mis hombros y oculté la nueva marca que Sofia dejó accidentalmente en mi pálida piel. Me odio por eso, no puedo ocultar ni el más leve rubor ni el más leve chupetón. Mis cicatrices pueden literalmente escribirse en mi piel. "Hola chicos."

Cameron vino y se deslizó a mi lado. "Hola, ¿Cómo va todo?"

"Maravilloso. ¿Tú?"

"He estado mejor." Se desplomó hacia adelante, plantando ambas manos sobre el linóleo azul claro. "Es una mierda que tenga dieciocho años y sea todavía soltero en el mundo de mujeres universitarias"

"Qué trágico, Cam" Le doy una palmada en el hombro. "Esas opciones de vida son difíciles recién salidas de la escuela secundaria" Se acaba de graduar, su novia acaba de romper con él, y él piensa que la vida es dura. Tengo historias para ti, chico; Haré que tus problemas parezcan minúsculos si los comparas con los míos.

Hizo un ruido con sus dientes y gruñó juguetonamente. Cam negó con la cabeza y comenzó a vagar por el piso hacia la sala de estar.

Thomas miró a su alrededor, su mirada atrapando la mía. "Dove" saludó.

"Hey, Thomas"

Puso su mirada en mi novia, estaba muy perdida en sus pensamientos. "Es un hermoso apartamento, Sofía."

Thomas no había ido hasta el día de hoy. Cameron es la única persona que alguna vez ha visto nuestro apartamento que recibimos hace aproximadamente tres meses en octubre. Se detuvo para ver cómo estaba hace un mes porque se dio cuenta de que algo no funcionaba. Fue su elección dejarlo entrar, ella confía en él. Pero desde entonces, ha sido tímida a su alrededor.

"Gracias. No lo hemos decoramos, aunque todavía se siente como en casa. De una manera extraña" A ella nunca le han gustado las playas y a mi tampoco, así que la decoración es simplemente una molestia relajante. Calmante, pero antagónico; apropiado, pero equivocado. "¿Cómo es vivir en Los Ángeles permanentemente hasta ahora?"

"¿Te mudaste aquí?" Pregunto, tratando de mantener el ritmo.

"Sí", acentuó. "Arrendé en la calle principal. Pequeño lugar. Nada lujoso, solo cuatro paredes."

Sofía se rió en silencio para sí misma, se cruzó antes de que yo tuviera la oportunidad de regatear palabras en la escena. Frunció sus labios rojos y miró a su alrededor, evitó mirar a nadie a los ojos. "Estuve allí el miércoles, ayudándolo, Dove. Le pregunté si quería venir"

"Pensé que habías dicho otra cosa" Esperaba que nos estableciéramos juntas, pero obviamente eso no sucedió porque aquí estamos.

Él encogió sus anchos hombros. "Pensé que estaría en la ciudad para trabajar más aquí. The Lodge es solo unos pocos días al mes, es más fácil que antes para mis eventos más concurridos"

"Ya veo." Me pongo las mangas en las manos debajo de la barbilla para apoyar la cabeza mientras me inclino sobre la mesa. Apenas estoy despierta. No me gustaría pasar un día sin Sofía, pero todo lo que quiero es dormir, dormir tranquilamente. A pesar de estar en lujosas habitaciones de hotel noche tras noche y finalmente compartir una cama con la mujer que amo, no he estado durmiendo bien.

Me Too {Dofia}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora