El Principio del Fin... [[cuarta temporada de "Mi Ancla"]]

4

Estábamos en la veterinaria, y Deaton miraba un trozo del vidrio del parabrisas del auto que fue atacado.

Solo que con una linterna de luz ultravioleta debajo, el vidrio se veía en tonos azulados.

-y escribe mágicamente las respuestas?-dijo Malia.
-no es así de simple.-le respondió Deaton.
-nunca lo es.-dice Lydia.
-con la escritura automática, la mano se mueve sin consistencia, esperemos que el silencio, la oscuridad y la luz te permitan encontrar un estado de trance más cómodo.-le dijo Deaton a la pelirroja.-quiero que veas la luz, y dejes ir los pensamientos.

Lydia asintió y puso sus ojos en la linterna de luz ultravioleta, y luego agarró la lapicera.

Seguimos a Deaton hasta un rincón, para que Lydia se concentre.

-debo advertirte que es posible que no accedamos a algunos recuerdos.-le dijo el veterinario a Scott.
-porque no?
-la leyenda dice que la cacería salvaje se lleva personas, pero si lo que dices es cierto, la verdad es mucho peor. Borran a las personas de la realidad.

Escuchamos como Lydia comenzaba a escribir en el papel.
-como recordamos si alguien fue borrado de nuestras mentes?-dije.
-tal vez no completamente.-dijo Malia mirando a Lydia, que escribía apresuradamente.
-está bien? Debemos detenerla?-dije.
-Lydia, más despacio.-dijo Deaton acercándose tranquilamente.

Apagó la linterna y Lydia nos miró.
-estas bien?-dije acercándome.
-Lydia?-dijo Deaton.

Malia agarró el papel y leyó.
-que significa "travesura"?
-no escribió eso...-dije.

Acomodé el papel para que sea más visible, había una palabra formada con todas esas.
-Que diablos es un Stiles?-dijo Lydia.

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Ya al otro día, junto a Scott y Lydia buscábamos el significado de un Stiles.

Pero nada parecía ser lo que buscábamos.

-Tal vez Malia encontró a algo.-dice Scott
-tuvo exámenes toda la mañana.-dije.

Al rato escuchamos un aullido, reconocible como Malia convertida en coyote.
-creo que el examen no fue tan bien...-dije juntando mis cosas.

Salimos de la biblioteca y fuimos al cuarto de depósitos, donde siempre iba malia.

Y allí estaba ella, pero en coyote, en una rincon.

-Malia, tranquila, estás a salvo...-le dijo Scott acercándose.-no voy a lastimarte. Ya se está calmando.

Y ella nos mostraba sus dientes, gruñendo.
-tal vez debas gruñirle también.-dijo el sheriff apareciendo.-Scott, eres el alfa, no puedes hacer que se vuelva un poco más dócil.
-ella no es el problema.-dijo Lydia.
-lo somos nosotros, es su territorio.-terminé.
-debemos irnos.-dijo Lydia.

-Malia venía aquí a superar sus lunas llenas. Luego empezamos a ir a la casa del lago.-dijo Lydia antes de salir.
-pense que había un animal salvaje en la casa.-dijo Natalie.
-mejor agradece que no te digo todo.

El coyote comienza a caminar, hasta que se transforma en Malia de nuevo.
-tranquilos, estoy bien.

Natalie avanzó y la ayudó a vestirse.
-sabes que provocó el cambio?-dijo el sheriff.
-esta muy presionada. La escuela, la vida luego de la graduación.-dijo Scott.
-su madre trató de matarla.-dijo Lydia.
-eso no debería provocarlo, podría estar relacionado con Stiles.-dije.
-ni siquiera sabemos que es un Stiles.
-es un "él"-dijo el sheriff.-Stiles, es un apodo de familia. Nunca lo he usado, pero mí padre si.

Miré a Lydia y a Scott sorprendida.

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El sheriff nos dijo que vayamos a su casa, dónde nos explicaría un poco del apodo Stiles. Y allí conocimos a su esposa, que era una mujer encantadora, y se notaba cuánto se querían.

Scott y Lydia se sentaron en los sofás, y yo solo me quedé parada detrás de ellos.

-era ingeniero del ejército. Acabó con la guerra un puente a la vez.

Le pasó una foto a Scott.
-y le decían "Stiles".-dijo él.
-que tiene que ver con la cacería salvaje?-dijo el sheriff.
-creemos que nos quitaron a alguien.-dije.
-pero saben a quien?
-los Jinetes Fantasma borraron nuestra memoria. -dijo Scott.
-bueno, que conveniente.
-tenemos una pista. La palabra "Stiles"-dijo Lydia.
-y por eso quieren hablar con Elías.-dijo la esposa del sheriff.
-tal vez pueda ayudarnos, tal vez sabe a quién estamos buscando.-dijo Scott.
-es alguien de su edad?
-si, yo... Creo que era mí amigo. Tal vez era mí mejor amigo.-dijo Scott.
-te garantizo que mí padre no puede ayudarlos.
-podemos intentar?-dije.
-Zaria, vive en un asilo, a tres pueblos de aquí, no ha tenido visitas en años.
-puedo usar su baño?-dijo Lydia apresuradamente.
-claro...

La pelirroja se levantó rápidamente y caminó hacia donde debe ser el baño.

Miré curiosa por donde se había ido.

-creeme, no querrás hablar con él. -seguía diciendo el sheriff luego de unos minutos.
-solo unos minutos.
-Scott, mí padre nunca logrará ayudarlos.
-solo unas preguntas señor, cinco minutos.-dije.
-sabes que? No dejaré que lo contactes. Bien? Solo busca otra opción.-nos dijo alterado.
-y si es la única manera?-dijo Scott.
-Scott, ya te respondió.-dijo su esposa.
-sheriff, por favor.
-Scott.
-la respuesta es no.

Cómo se dio por finalizada la conversación, los tres salimos de la casa y fuimos al instituto. Allí buscamos a Malia, ya que de todas formas, iríamos al asilo de ancianos.
-allanaremos una casa de ancianos?-dijo Scott cuando llegamos.
-despues de los encargados de Eichen, podremos con las enfermeras.-dijo Malia.

Al mismo tiempo que me sonreía y yo a ella.

Entramos sin esperar a los chicos y fuimos directo a dos enfermeros que habían.

A uno ella le golpeó la nariz contra el escritorio, y al otro, le di una pequeña patada en la entrepierna, y luego un golpe detrás del cuello que lo dejaría inconsciente un rato.

Los escondimos en una habitación y cerramos.

Choqué los 5 con Malia y, luego de que Scott y Lydia vinieran, fuimos a la habitación que leímos en la que estaba el padre del sheriff.

-si?-dijo cuando nos vió-es hora de mí medicina?
-no tenemos su medicina.-dijo Malia.
-eres Elías Stilinski?-dije.
-asi es.
-soy Lydia Martin.-dijo ella acercándose.-sabe quien soy?
-deberia?-dijo confundido.
-señor Stilinski, buscamos a alguien que se hace llamar Stiles. Le decían así en el ejército, verdad?-dijo Scott.
-si, los mejores años de mí vida.
-reconoce a alguno de nosotros?-dijo Malia.
-claro que si. Cómo olvidaría a mí propio hijo?-dijo mirando a Scott.
-su hijo?-respondió él.
-señor Stilinski, que año es?...-dije.
-1976. La próxima semana es el cumpleaños de mí hijo.
-tiene demencia.-dijo Lydia.
-es hora de mí medicina?-volvió a decir el Elías.