Mi novia tan Jedi.

Capitulo III

Narrador Omnisciente

Capitulo III "ESTRELLA"

Lena y Kara catorce años.

Todo mundo no hemos sentido atraídos por alguien en algún momento de nuestras vidas, el enamoramiento es una enfermedad mental según los griegos, el amor es un poema lleno de versos tristes y alegres y quizás nos hace mejor persona o muy en el fondo la peor persona del universo, todo depende de cómo tomes esta gran aventura. Kara conocía los síntomas de un enamoramiento, Alex había comenzado a llevar su novio Peter y algunas amigas del colegio ya tenía novio o por lo menos habían dado su primer beso, bueno pues Kara era la excepción no había dado a nadie su primer beso y ni mucho menos un novio o novia, llevaba meses plateando esa posibilidad y Steph era quien le había preguntado en una pijamada, la joven rubia no tenía respuesta a una pregunta tan aventurada.

Era viernes de películas en la casa de Lena, ambos grupitos formaron un sólido y único grupo, siempre hablaban de niñerías, política, ciencia y sobre cosas frikis, era un grupo armonioso. Esta tarde los padres de Lena salieron a la ciudad y el hermano de Lena, Lex iría una fiesta de su fraternidad, casa sola. Kara siempre discutía con Lena, este día Kara llego antes y encontró a una Lena perdida mirando directamente hacia el cielo, por esa ocasión se dejó llevar por sus pensamientos que la agobiaban al igual que Kara, temía no estar creciendo de la manera correcta en el aspecto amoroso.

Era una tarde-noche de abril muy fresca, Lena no llevaba suéter noto ese ligero escalofrío, unas largas manos la abrazaron por la espalda, en un principio asustada se movió pero cuando el olor a vainilla llego a su nariz, trato de relajarse pero aquel gesto aumento el escalofrió en todo su cuerpo, sentía como temblaban sus piernas y sentía el corazón en la garganta.

-¡Heey!..-susurro Kara en su oído- ¿quieres mi sudadera?

-Mm...-el sonido emitido pareció mas un quejido que una respuesta esto inundando de pena a Lena- yo...claro que sí, pensé que llegarías dentro de quince minutos con los demás.

-Oh no, quería ayudarte para preparar el maratón de Star Wars tonta Jedi –rió un poco- ¿estás bien? Estas temblando.

Quien si no, el aliento en el oído no ayudaba en nada a las pobres hormonas de Lena. Kara estaba jugando con fuego pero quien la puede culpar, ella amaba estar abrazada a Lena. El cielo pasó a un color naranja, uno completamente oscuro como el cabello de Lena.

Lena sonrió al sentir los labios de Kara en su mejilla, hace meses que el ritual de darse besos en la mejilla le parecían lo más correcto, algo en la cabeza de Lena hizo clic y algo temerosa comprendió lo que pasa, estaba sintiendo cosas por su némesis y amiga Kara Vader, una completa locura, pero uno no tiene el poder de elegir de quien enamorarse, Lena entendía eso lo que parecía contrariarla era... ¿ella me podrá corresponder?

-Mira que hermosas son las estrellas –susurro pensando en los ojos de Kara- nunca pensé decir pero existe algo mejor que ellas.

-¿Qué puede ser mejor que una estrella?

-Tu mirada. Pensó Lena en el fondo. Las palabras que se quedaron atoradas en sus labios por temor a las consecuencias.

-Te lo digo después.

Se giró un poco y trato de apartarse pero Kara instintivamente la tomo de la cadera para reducir el espacio.

-Espero no digas que existe alguien más bello que eso, no lo hagas. Pensó Kara un poco asustada por pensar que existiera una persona así en la vida de Lena.

-¿Prometes que me lo dirás?

La mirada azul de Kara tenia desconcertada a Lena, jamás había visto esa mirada llena de preocupación y afecto.