sHe ~Joerick~

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Advertencia: en este capítulo hay Joel!tops.

~•~

"HA, HA, sí claro, y ¿tú pretendes que te crea? Si me dijiste que era mentira que tenías novia"

"También te dije que te amaba... y esa fue otra mentira" Erick sonrió muy falsamente.

Joel frunció el ceño. Okay, eso no se lo esperaba. Pero Erick podía hacer lo que se le dé la gana, ¿verdad? Ellos sólo tenían sexo, y ahora dejaron en claro que no lo harán más porque ambos están con otras personas. Entonces... ¿Qué es eso que está sintiendo? Su pecho le duele un poco, y sus latidos se aceleraron. Se siente agitado, y es imposible que lo esté porque ahora está acostado...oh, oh...

"Quédate aquí, quédate conmigo"

Erick se cruzó de brazos, completamente serio. "¿La Princesa está celosa?"

No quería esto, pero no le queda alternativa. Joel quiere que se aproveche de él, entonces va a empezar a hacerlo. ¿Quiere sexo? Le dará sexo, pero cuando él tenga ganas, no cuando a Pimentel se le antoje. Las cosas de ahora en más van a cambiar, porque se cansó de ser el que sufre de los dos.

Joel se puso de pie. "Sí, estoy celosa—digo, celoso. Eso de Daddy se supone que es conmigo nada más. ¿O qué? ¿Lo haces con todas?"

"Oh, olvidé que tengo un cartel en la frente que dice 'Sólo soy Daddy para Joel Piment—¿Qué-qué haces?"

Joel se acercó a él comenzando a desabrochar su pantalón. Erick estaba confundido; por un lado estaba dolido porque acaban de rechazarlo, y estaba tratando de acomodar las ideas en su cabeza, y por otro lado, estaba sumamente caliente, porque mientras él debatía con su mente, su amigo comenzó a hacerle una mamada.

Su respiración era acelerada, debido a la inesperada sorpresa. Su miembro no estaba erecto, pero tan pronto la lengua de Joel se posó sobre su piel, aquel comenzó a cobrar vida por su cuenta, sin su autorización.

El pelinegro llevó ambas manos detrás de su cabeza, comenzando a jadear sus gemidos...es que, ¡mierda! Joel lo hace tan bien.‎

Sintió el frescor de su saliva en el glande, porque Joel estaba todo el tiempo masticando chicle de menta, y la sensación era distinta. Joel aún no se había quitado el chicle de la boca, y soplaba, provocándole escalofríos a Erick.

Él ya estaba sumamente listo para levantar a Joel de suelo, voltearlo y penetrarlo de una, sin preparación. Esa mamada se merecía una buena cogid-, pero hey... en cambio, Joel lo dio vuelta, inclinándolo sobre la cama, para comenzar a penetrarlo con su lengua.

Erick temblaba del éxtasis, porque hace mucho tiempo que Joel no hace esto, pero se sentía tan jodidamente bien.‎

‎Una vez que el pelinegro estuvo vulnerable, Joel se aprovechó de eso, y escupió su mano para mojar su miembro. Se fue deslizando lentamente sobre su cuerpo mientras lo llenaba de caricias y lo masturbaba. Erick estaba inmóvil, preso del placer, dejando escapar un suspiro suave, pero ansioso, y excitante. Su cadera comenzó a moverse, primero suavemente, de modo casi imperceptible. Luego de forma cadenciosa, con movimientos suaves, acompañados de suspiros y algún leve quejido. Joel no esperó demasiado, y lo penetró con fuerza, hasta la base, sin piedad.

"Daddy está gimiendo mientras su Princesa lo rompe todo, ¿verdad?" el moreno rió por poder alardear. Erick estaba tan estrecho, que Joel se sentía en la gloria.‎

En un momento, el cuerpo de Erick pareció estremecerse, su garganta dejó escapar un suspiro casi gutural y tensó su cuerpo. Su respiración volvió a acelerarse, su cadera volvió a moverse, ésta vez de una manera mucho más profunda, ayudando a la penetración. Erick lo apretó contra él, atrayéndolo por los muslos.