sHe ~Joerick~

23

Erick se acercó sonriente y lo abrazó con fuerzas. Joel aún no procesaba aquellas palabras, y fue por eso que correspondió al abrazo a medias. ¿Despedida?

"Espera, Er" Joel quiso romper el abrazo, pero Erick lo atrajo nuevamente.

"No, Joel, no, no. No hace falta que digamos nada más, de verdad. Estoy bien, en serio, no te preocupes"

"No, Erick, pero-"

"Joel... no digas nada"

Joel calló lo que estuvo pensando en todo aquel tiempo que hicieron el amor, porque ambos hicieron el amor, y él no supo que iba a ser la última vez, no hasta ese momento.

Se odió por ser un cobarde que no enfrenta ni siquiera sus propios sentimientos. Entonces tomó coraje. "Er, necesito decirt-necesito que-"

"Joel, no la cagues otra vez. ¿Puede ser?"

Joel cerró su boca, presionando sus labios fuertemente. Y sí, probablemente Erick tenía razón, como siempre, porque él era la mente, el que pensaba de los dos. Si hablaba era para cagar todo, porque él era experto en eso, por algo con Zabdiel son como almas gemelas, los dos son igual de estúpidos que no supieron valorar lo que tenían hasta que lo perdieron.

En ese momento se dio cuenta de que perdió a Erick, lo perdió como amigo hace dos años y ahora lo perdió como todo y para siempre.

Se levantó de la cama de un movimiento brusco, levantando su ropa del suelo para colocársela rápidamente. Erick estuvo a punto de pedirle que se quedara, pero luego recordó que Zabdiel estaba en su casa, y por más que así no fuera, iba a ser peor si dormían juntos.

Ésta era la última vez, la última de todo porque no podían volver a ser amigos, o lo que sea que eran. Era una despedida.

Joel estaba terminando de colocarse las zapatillas, y se puso de pie para salir de la habitación sin siquiera voltear a verlo. Erick saltó de la cama y corrió a abrazarlo desde atrás.

Quería llorar, mierda, quería llorar tanto, pero no lo iba a hacer delante de él. Se dio vuelta y lo abrazó con fuerzas, casi clavando sus uñas en su espalda. Su nariz estaba pegada al cuello de Erick, oliendo su esencia, su olor, el sudor de ambos... ese era su aroma favorito en el mundo.

Rompieron el abrazo lentamente, y Joel se acercó, sorprendiéndolo con un suave y fugaz beso en los labios. Duró tan poco que Erick no tuvo ni siquiera la oportunidad de poder corresponderlo.

Joel se fue.

Erick volvió a acostarse en su cama, y allí lloró un poco al recordar. Joel estaba siendo un cobarde en este momento. Estaba actuando de la misma manera en que él actuó la mañana siguiente cuando tuvieron su primera vez.

[...]

Cuando abrió los ojos a la mañana siguiente lo primero que se dio cuenta, fue el hecho de que estaba solo en la cama de Joel. Por un momento estaba confundido, porque no recordaba porqué estaba ahí. No sabía si era cierto o no, creyó que lo había soñado, hasta que los recuerdos empezaron a llegar de nuevo a su mente. Imágenes intermitentes que se ejecutan a través de sus pensamientos como una película de su primera vez. Sus cuerpos chocando y luego se recuerda quedándose dormido al lado de él.

Sacudió su cabeza un poco, se sentó en la cama, apoyándose en el respaldo. Estaba desnudo bajo edredón de Joel, luego de haber tenido sexo con él toda la noche. No podía llamarlo 'hacer el amor' se regañó así mismo, aunque para él había sido eso.