DOOMED [MARK TUAN Y TU] SECUELA

Capítulo 23

NARRA _______

Todos nos quedamos congelados ante esas palabras, ninguno de nosotros sabía cómo reaccionar al tener en frente a tan terrible persona.

—¿Que haces tú aquí, no estabas en prisión?— preguntó Bam Bam

—La prisión no es lugar para personas como nosotros, ¿verdad Oliver?— soltó una risita altanera

—Yo no soy como tú, maldita rata asquerosa— dijo molesto

—Tienes razón, ustedes dos, hermanos del infierno, son mucho peores que yo—

—¿Que vienes a buscar aquí? Ninguno te invito a la boda de ____— gritó Oliver

—¿Boda?— me miró —¿tan rápido olvidaste todo lo que hice por ti?—

—Tu no has hecho nada por mi, no algo que yo recuerde— respondí

—¿Hacerte millonaria no fue suficiente? Hice todo por ti, viaje a Seúl sólo por seguirte, se hice pasar por tu mejor amigo cuando estaba completamente enamorado de ti, arriesgue mi vida por ti, así que dime, ¡NO FUE SUFICIENTE PARA TI!— su rostro comenzó a tomar un color rojo

—Intente decirte varias veces que no me interesaba estar contigo, ni tu asqueroso dinero, ni tu puta mansión en la que pase varios años encerrada para que no me diera cuenta que viví engañada por mis padres y por ti, ¡ERES UNA MALDITA BASURA, MALDITO ESTÚPIDO!— grité con todas mis fuerzas

Las miradas de los cuatro hombres estaban posadas sobre mí y la mirada de Aiden era cada vez más pesada.

—Vaya, debo reconocer que me sigues sorprendiendo _____, mientras más pasa el tiempo tu eres cada vez más idiota— me miró con pesadez —Vamos, tus padres están esperando por ti y por nuestra relación formal—

—No voy a moverme de aquí, ¿acaso no escuchas que voy a casarme con Mark—

—¿Y tu no escuchas que no voy a dejarte con él? Si no eres mía, nunca serás de nadie— saco su arma de su abrigo

—¡LÁRGATE DE AQUÍ DE UNA BUENA VEZ!— dijo Oliver con un arma en la mano

—Vaya, el cobarde va a hacerme daño, tu no matas ni a una mosca Oliver— apuntó hacia él

—¡Dejalos ser felices! Ellos no tienen la culpa de que tu seas una persona amargada que no quiere ver a los demás felices— contestó Oliver

—¡CLARO QUE TIENEN LA CULPA! Mark me quitó todo lo que tenía—

—Nunca la tuviste— respondió Mark

—Y nunca voy a dejar que la tengas— apuntó hacia nosotros —Es por eso que voy a acabar con sus vidas— quitó el seguro de la pistola

Miré a Mark, a estas alturas ya no me importaba morir y si no lo hacía de esta manera, iba a morir en el quirófano, mi cuerpo ya no iba a resistir más. Mark tomó mi mano y me acerco a él.

—Adelante, ¡DISPARA DE UNA BUENA VEZ! Ya no me importa morir, al menos moriré con ella— beso mi frente

—No me provoques Mark, tu no me conoces—

—Te conozco mejor que nadie, eres un maldito cobarde, ¡DISPARA DE UNA BUENA VEZ!—

Aiden iba presionando el gatillo lentamente

—¡OYE, ESTÚPIDO!— gritó Oliver —Tu no mereces vivir, nos veremos pronto, al menos que no sobrevivas— Oliver disparo justo en su frente

El cuerpo de Aiden había caído en la nieve, que velozmente tomó un color rojo. Mis ojos se abrieron, al igual que los de los demás.
Nos tomó tiempo poder asimilar lo que había pasado, hasta que algo nos sacó de shock, la voz de Oliver.

—______, fue un placer haberte amado en esta vida, Bam Bam, me alegra que seas mi hermano, cuida bien de mi madre y mi hermana y Mark, te odio maldito, pero igual la mereces más que cualquier otro hombre en el mundo— las lágrimas salieron de sus ojos

—¿Qué estas pensando hacer?— preguntó Bam Bam

—Lo que debí hacer hace mucho tiempo— el sonido ensordecedor de la pistola retumbó nuevamente

Oliver había caído en la nieve, se había suicidado. Sus lindos ojos azules habían perdido el brillo y la inocencia con la que a veces me miraba, el grito desgarrador de Bam Bam lo hizo aún peor, las lágrimas escapaban de mis ojos, pero no había podido moverme, ni decir nada.

Oliver, donde quiera que estés, quiero decirte que eres un maldito enfermo, pero también eras una persona muy especial, aunque lo psicópata no te lo quita nadie.