Memorias Olvidadas

Capítulo 13

Hace mucho tiempo existían tres reinos tan diferentes, dos de ellos eran los más poderosos y desde siempre habían sido enemigos. Uno de estos reinos eran los fríos, bellos, poderosos, inteligentes, reservados y orgullosos pero justos; el otro reino eran los luna, poderosos, salvajes, fuertes y orgullosos como los otros además de justos, aunque no luchaban entre ellos, nadie se metía en el territorio del otro porque existían leyes y todos las respetaban. El tercer reino lo formaban los humanos no poseían conocimiento de los otros reinos, ni que los estos compartían la única ideología de protegerlos. En cada reino existían grupos que estaban en desacuerdo de lo que decían sus reyes, por lo que hacían revoluciones e iban a atacar al otro reino. Los reyes mandaban a eliminar a todo aquel que se opongan a ellos.

Un grupo del reino de los fríos y otro de los de la luna se unieron por su sed de poder, y se opuso a los reyes, estos fueron desterrados y eliminados por crear disturbios en la población que protegían estos dos reinos, dando así ejemplo para futuras revueltas.

Al pasar el tiempo los reyes se reunieron y formaron alianzas para vivir pacíficamente entre ellos buscando lo mejor para su especie y de la población que protegían. Lo que no sabían es que algunos de los desterrados habían sobrevivido y vivido en las sombras hasta que el día de su venganza llegara. Pasaron siglos hasta que el día llego, se habían penetrado en la población que se estaba protegiendo. Nadie se había dado cuenta de su presencia hasta que la población que protegían iba incrementando en muertes. Los dos reyes pusieron a sus mejores guerreros para atrapar a los culpables, por lo que desato la guerra.

Las batallas eran pocas y los reyes estaban ganando. Cuando estos estaban en una reunión para discutir estrategias de batalla con sus generales, hubo un disturbio que no lo esperaban. Al parecer las pequeñas batallas fuera del castillo habían sido solo distracciones para la batalla real. Habían más en número de lo que esperaban, aún siendo dos reinos unidos. El enemigo había estudiado todo el terreno y las habilidades de sus contrincantes, además habían aprovechado las muerte y desapariciones de la población convirtiéndolos en ellos. Por esto tenían la ventaja pero no había que menos preciar la fuerza que tenían los reyes y de sus guerreros que eran puros en sangre y no simples convertidos.

La guerra duro semanas, para no decir meses. Hubieran muchas bajas en cada lado, al final los reyes habían ganado. Esta guerra hizo que la población que protegían ya no confiaran en ellos, ya que por ellos había ocurrido esto. Además que por la guerra notaron lo que ellos eran en realidad, aunque los hayan salvado y el enemigo estaba muerto, ellos ya no eran queridos por la población que amaban solo temían.

Los que habían sobrevivido de los reinos se alejaron del lugar odiando a esa población ya que por protegerlos habían acabado con ellos y con sus familias, y en vez de gratitud solo recibían desprecio. Se mudaron a ciudades lejanas pero no pudieron sobrevivir y murieron porque la voz de aquella población se rego y ellos eran buscados para matarlos. Los reyes también se fueron y se mudaron a lugares muy lejanos entre ellos pero a diferencia de los demás ellos decidieron vivir alejados de las ciudades. Vivieron por muchos años, tuvieron hijos y estos más hijos.

– “Bonita la historia pero qué tiene que ver con nosotros?” – dijo Ethan.

– “Calma, calma. Qué impaciente!.” – contestó Carl.

– “Por qué eran diferentes a los demás?” – pregunte.

– “Esa es la pregunta que quería escuchar.” – dijo Carl. – “Eran diferentes porque el reino de la luna era de hombres lobos y el reino de los fríos…” –

– “…Era de vampiros.” – dije antes que él terminara la frase. Todos me miraron esperando que dijera algo más. – “Lo supuse porque en un libro que leí, se les llamaba en la antigüedad los fríos a los vampiros.” –