Ya es por la tarde y aún que no lo quiera admitir, echo de menos a Brad. Jodido día de ir a pescar. ¡Tenía que ser hoy ese día, ¿no?! Llaman al timbre y cuando abro algunos del equipo de hockey está en la puerta sonriéndome.
—¿Chicos? —Pregunto algo anonadada, ¿qué coño hacen estos aquí?
—Venimos a verte —James habla primero. —Sabemos que te abriste el hombro y que estás deprimida porqué no puedes entrenar, bueno más bien por qué no puedes ver mi perfecta cara, así que te hemos traído películas y comida de Mickey's además de nuestra maravillosa compañía, ¿qué te parece tú tarde? —
¿Ahora entendéis por qué no necesito amigas cuándo tengo a este equipo?
—Oh. —
—¿Oh? ¿Te venimos a visitar con todo eso y tú sueltas un "oh"? —
—Bueno, es que sinceramente... No sé que decir... Gracias chicos, pasad. —
Me hago a un lado dejando pasar a cinco chicos. Cuando estoy a punto de cerrar la puerta algo azul llama mi atención.
Veo a una chica con el pelo azul acercándose aquí con una sonrisa. Me suena de algo pero no me acuerdo. Cuando está a casi diez pasos de mi casa, me acuerdo de ella.
Alice. La chica que me ayudó en el entrenamiento de patinaje artístico.
Ella ya ha llegado a la puerta y su sonrisa sigue ahí.
—Hola Scar. —
—Alice, ¿qué haces aquí? —Ni si quiera me molesto en ocultar que estoy sorprendida. —
—Pregunté a los chicos por ti y me dijeron que estabas lesionada así que decidí a visitarte para ver como estabas. ¿Vine en un mal momento? Por qué me puedo ir, tranquila. No pretendo ser una molestia. —
Le sonrío con sinceridad. Ella realmente sin apenas conocerme se había preocupado por mí y había venido aquí a visitarme solo para saber cómo me encontraba.
Quizá podía ser mi primera amiga.
Sí, vale.
Quizá.
Sí, tiene todos los números de poder ser ella.
Me hecho a un lado cómo queriendo decir que pase y ella asiente mientras pasa al comedor. Cuando entro, ya no hay mesa entre el sofá y el televisor y en ese espacio hay mantas y cojines. Daniel y Tylor intentan saber dónde va el DVD ya que al ser una televisión tan grande a penas se ve la rendija por donde se pueden introducir los DVD's. Intento ayudarles pero en ese momento Scott, el que está luchando para abrir una bolsa de palomitas, grita a todo pulmón.
—¡Deteneos todos un momento! ¡Blumer está intentando ayudar! ¡Cogedla! —James y Chad en cinco segundos me tienen sentada en el sofá, sin dejarme moverme. Intento librarme de ellos pero Chad tiene su agarre en mi hombro izquierdo bastante fuerte.
—Chad. —Le miro y niega con la cabeza. —Chad de verdad. —Vuelve a negar con la cabeza. —Chad, amigo, tendrías que aflojar ese agarre.
—Te he dicho que no Blumer. No te vas a escapar. ¿Qué pasa si ayudas y tú herida se abre? ¿Eh? No quiero tenerte lesionada más semanas, así que no ayudarás pase lo que te pase. —
—Está bien, pero te recuerdo que estoy lesionada por el hombro izquierdo, justo en el punto en el que estás agarrando tan fuerte, sólo eso. —
Escucho risas de los chicos y de Alice, Chad me mira avergonzado y afloja su agarre.
—Lo siento mucho, Scar. No pretendía hacerte daño. —
—No, está bien, sólo me molestaba. — Miro alrededor y Daniel y Tylor por fin han podido poner el DVD dentro de la televisión, Alice está ayudando a Scott con la bolsa de palomitas y mientras Chad me sujeta James está colocando mejor los cojines del suelo.