«¡Escuchame por favor!»
El partido finalmente termino, y para nuestra mala suerte perdimos, gracias a nuestro inteligente Coreback Niall, toda la escuela, bueno, solo los hombres abuchearon a Niall. Y las mujeres, solo le aplaudían, le animaban, algo que me molesto demasiado, después del partido, Calum y Justin me llevaron a comer, se me olvidaron por un buen rato mis
problemas con Niall, hasta que llegue a mi casa y lo vi, ahí. El estaba platicando de quien sabe que cosa con mi hermano. Calum y Justin se dieron cuenta y comenzaron con sus estupideces.
—¡Vamos cariño! Dile a Justin que me amas mas a mi.—Grito Calum llamando la atención de Harry y Niall.
—¡Maldito gilipollas! ¡Con un coño! ¡Ella me ama mas a mi!—Grito Justin de regreso. Caminamos justo hasta llegar al frente de las escaleras, y al frente de Harry y Niall.
—Que me ama mas a mi.
—Que no, a mi.
— A mi.— Y así siguieron, mientras yo solo miraba a Niall que fulminaba a mis dos mejores amigos con la mirada. Finalmente no me pude mover de mi lugar. Niall se paro del sillón donde se encontraba, y camino lentamente hasta llegar a mi.
—¿Querías que me enojara? — Me pregunto tomandome de la muñeca.
— ¿Que mierda te pasa Niall?— Pregunte exasperada, todo en la casa era silencio.
— ¿Que mierda me pasa? — Me vuelve a preguntar.— Solo te dejo por un día, y ya estas de zorr* besandote con otro tipo.—Dijo mirando mal a Justin.
— No voy a permitir que me hables así Niall. ¿Crees que yo no vi lo que tu hiciste? ¿Crees que soy ciega? No Niall, no lo soy. Tu te estabas
tragando a esa maldita zorra. —Grite hecha una fiera... digo una furia. Niall me miro extrañado.
—Oh no me digas, que no. No, my Horsie* ¿tu viste lo que ella hizo?— Me preguntó. Que sínico.
—No solo lo vi. También vi como tu le respondiste, maldito estupido, oh ¡y no soy tu maldito caballo con un coño! —Grite mas furiosa por todo lo que paso. Subí a mi habitación, unos segundos después escuche unos gritos. No se por que, pero me puse a llorar en mi cama. Llore por lo que parecieron ser veinte minutos. Los gritos no paraban. De un segundo a otro todo fue silencio. Y agradecí por eso. Después tenia tanto cansancio que me quede medio dormida. Aun podía escuchar los ruidos pero no podía moverme ni abrir los ojos.
—¡Baldwin!—Grito una voz, Lo ignore por completo.
—¡Vamos levanta cariño!—Escuche otra voz. Como les gusta molestar.
—5 minutos mas mami.—Dije sin querer. Las palabras salieron por si solas. Risas se escucharon en toda la sala.
—No soy tu mami.—Dijo otra voz. Trate de abrir mis ojos la luz de la recamara era muy fuerte así que los volví a cerrar.
—¿Que hora es?—Pregunte removiéndome en mi sitio.
—Las ocho de la noche.
—Por favor, levanta.—Y como si una fuerza muy grande estuviera de mi lado. Abrí los ojos de golpe. Y me senté algo agitada.
—¿Estas bien?—Me pregunto esa voz. Esa maldita voz. Lo busque con mi mirada por toda la habitación, de izquierda a derecha, hasta que vi que estaba a mi derecha. Así que justo cuando lo vi, me caí de la cama. Otras risas que provenían de el lado donde me caí me dejaron casi sorda. Mire mal a mis dos mejores amigos que también estaban en el piso pero revolcándose de la risa.
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Todas Contra Horan. [N. H] Editando
FanfictionUna chica nueva, un juguete nuevo, una venganza entre manos, muchos secretos ocultos y varios sentimientos. Si pensaste alguna vez que tu vida es complicada, siempre alguien tiene cosas peores, aunque suene egoísta.