Atada A Ti (Michael jackson)

Capítulo 8

Después de esa clase horrible, salí del Salón, desde lo ocurrido con Michael muchos chicos se han acercado a mí para saber más de Michael.

Ya en el estacionamiento pude ver a Michael esperándome, me acerqué y él me tomó de la cintura.

Michael: ¿Cómo estuvo tu día?

-Bien... ¿Y el tuyo? -Respondí insegura ante su raro humor.

XX: Allison... -Me puse alado de Michael.

-Dime, Kate.

Kate: Sólo quería saber si estarías en mi fiesta de cumpleaños.

-Claro que estaré allí... -Michael apretó mi cintura -Estaremos, estaremos allí.

Kate: Bien... Los espero el fin de semana.

Michael: Estaremos allí.

Kate: Bien, gracias. -Se despidió y se fue.

Michael: Vamos... Entra. -Me abrió la puerta.

Él rodeó el auto y entró en su lugar, encendió el coche y en silencio fuimos hasta casa de mi madre.

Cuando nos abrió la puerta la abracé, la había extrañado mucho.

G: oh cariño, te extrañe tanto.

-Y yo a ti madre.

G: Bienvenido, Michael.

Michael: Gracias.

-Ven cariño. -Tomé su mano y entramos a la casa bajo la atenta mirada de mi madre.

G: Que gran cambio.

-Sí... Sólo debíamos conocernos mejor. -Besé la mano de Michael.

G: Quién lo diría cielo. -Fuimos al jardín.

Michael: Vinimos porque Allison quería verla.

-Te he extrañado mucho madre, ¿Cómo está mi padre?

G: Muy bien, él también te extraña.

Michael: Haremos una fiesta de compromiso, quiero que mi familia conozca a mi princesa.

G: Eso es grandioso, ¿Cuando lo harán?

Michael: la próxima semana.

Eso no lo sabía, besé la mejilla de Michael.

-Esperamos verte Madre.

G: Claro.

Michael: Bueno... Ya tenemos que irnos.

-Pero acabamos de llegar...

Michael: Mi madre nos espera.

G: Puedo ir a verte otro día, ahora ve con tu novio.

-Bien. -Besé su mejilla y la abracé.

Volví con Michael a su vehículo, me abrió la puerta y entré.

Cuando llegamos a su casa fui a darme una ducha y luego salí arreglamdome hice caso omiso a Michael que estaba acostado en la cama.

Michael: esto es para tí.

Me entregó un lindo collar de oro con el dije de un corazón y el símbolo del infinito cruzados.

-Es hermoso... Gracias. -Se puso detrás de mi y ayudó a ponérmelo.

Nos miramos a través del espejo por varios minutos, luego los dos volvimos a lo nuestro.

En cuanto su madre llegó ambos bajamos tomados de la mano a saludarla, el almuerzo fue bastante bien; Michael le contó de mis estudios y de algunas cosas que haríamos en el futuro.