Nick.
Amo a Lucía. Y eso es poco.
La amo jodidamente mucho.
Amo todo lo que es y representa. Amo con locura a su hijo que me tiene a sus pies también.
Diablos. Espero que mi pequeña nunca me deje. Porque sino estaría acabado. No seria nada mi vida sin ellos a mi lado.
El motivo por el que los estoy llevando a Disney en este momento es porque tengo una propuesta para ellos. Una que no sé si van a aceptar. Pero que por ellos me arriesgo lo suficiente como para poder ser rechazado también.
El que no arriesga no gana.
El pequeño Ben está cómodamente dormido en las piernas de su madre, y ella está dormida sobre mi hombro.
Sin dudarlo mucho saco mi teléfono y capturo la foto.
Sonrió ante el recuerdo del cumple de Ben. Era tan grande la felicidad que cargaba encima cuando le di el obsequio que me invito a dormir a su habitación. Algo que no dude en aceptar. Esa noche, Lucía durmió sola en su habitación. Por más que me tentaba la idea de cruzarme por unos minutos para una sesión de besos o algo más, me comporte y dormí con mi hijo al lado.
Al día siguiente fuimos al centro comercial para comprar unas cosas para el viaje. Estuvimos alrededor de tres horas haciendo todo, y al final del día optamos por cenar allí y luego ir a un parque de diversiones.
Nunca me rei tanto en mi vida.
Nunca fui tan feliz como ahora lo soy con ellos.
Si bien en mi antigua relación terminé mal parado. Siempre supe que algún día encontraría una chica ideal que sea divertida y que comparta los mismo gustos que yo.
Carol no era como Lucía.
Y nunca lo va a ser.
Ella a pesar de haber criado a un hijo sola sin una figura paterna para Ben, salió adelante. Tuvo que poner toda su fuerza de voluntad para no hundirse en una peor depresión. Lucho con todas sus fuerzas para ser la mujer que es ahora. La mujer más hermosa, atenta, respetuosa, divertida. Y la mejor madre.
El amor de mi vida.
Cierro los ojos y disfruto la sensación de calidez y paz que siento en el cuerpo. Con una sonrisa en los labios, caigo en un profundo sueño de familia feliz.
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Contigo
Romance¿Sabes? por un momento volví al tiempo atrás, donde solamente me preocupaba por conquistar a una persona de la cual no se intereso lo suficientemente por mi. Me dejó ir. ¿Y hoy que es lo que hay frente a mi? Alguien a quien le entregué mi cuerpo y...
