Capítulo 8

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La calle está oscura, cosa que le pone un poco los pelos de punta pero hará lo posible para soportarlo. La farmacia se encuentra varias cuadras atrás de su departamento, iba a tener que caminar bastante. Los autos pasan a su lado, cada tanto iluminando su figura. Agradecía que a pesar de la hora, hubiera un par de personas circulando por la vereda. 

Pensó en Katsuki, en lo mucho que debe estar sufriendo ahora mismo. 

Recordó varias veces como debía pedir la pastilla, compraría una caja por las dudas porque no sabe cuántas deba tomar su híbrido. 

La caminata duró cerca de diez minutos, y con cada paso sentía el latir apurado de su corazón. Si es sincera, odia ir a comprar cosas por su cuenta. Su leve fobia social le causaba complicaciones a la hora de hacerlo, deseaba dejar de preocuparse por cosas pequeñas.

Logró ver el cartel luminoso de blanco y verde a lo lejos. Apuro el caminar, feliz de ver que no hay muchas personas por lo tanto la compra seria rápida. Se fijó a los lados antes de cruzar, viendo que ningún auto avanzaba por la oscuridad de la noche. 

Dentro del local, sintió un claro aroma a medicamentos y artículos de limpieza. El piso es blanco, tan brillante que un poco más y podría ver su rostro. Hizo fila, sus ojos observando las diferentes vitrinas, casualmente deteniéndose en el de labiales. Puede que no utilice mucho maquillaje —no puede desperdiciar dinero en ello— pero definitivamente los bálsamos o brillos le gustan. 

El farmacéutico le dio una mirada, antes de hablar—Buenas noches, ¿que se le ofrece?

(T/n) sintió el ligero temblor de sus manos, pero hizo a un lado su nerviosismo y formuló la respuesta con tranquilidad.

—Quisiera comprar una pastilla para mí híbrido, es canino, raza Pomerania —el hombre asintió un par de veces, desapareciendo en el fondo, entre las largas hileras de repisas con diferentes cajas de medicamentos. Volvió con una en mano, y la dejó sobre el mostrador—¿Cuantas veces deberá tomarla? Es la primera vez que tengo un híbrido..

—Oh, bueno, al ser raza pequeña, con que tome una cada veinticuatro horas será suficiente. Las razas grandes ingieren más. —le dijo el precio, y (T/n) dejo el dinero correspondiente en la mesa. La caja es de un tono morado con blanco, tiene la imagen de un híbrido bastante hermoso con una pastilla en la mano y una sonrisa. 

Como diciendo que toda tu vida podrá solucionarse con eso. 

Hizo una mueca, colgando la pequeña bolsa en su muñeca. Guardó el cambio y agradeció por lo bajo, retirándose de forma silenciosa. 

Se detuvo en la entrada al escuchar un trueno, junto con la enorme cantidad de gotas que caen. Un pequeño charco se formó cerca del letrero luminoso, que se reflejaba en el agua. Una imagen distorsionada, que titilaba. 

Un suspiro pasó por sus labios, a la vez que se cubría parte de la cabeza con la ropa. 

Apenas se abrieron las puertas automáticas, salió corriendo por la calle, evitando patinar con el agua. Estuvo trotando por una cuadra entera, hasta que en la siguiente encontró un lugar donde detenerse y descansar aunque sea unos breves segundos. 

My almost Sweet Puppy [BNHA] [Katsuki Bakugou x Lectora]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora