「Amar y Servir」 [TaeKook-VKook]

》17《

Cuando el juez dictó la sentencia sentí los brazos de todos abrazándome. Llorábamos juntos por nuestra victoria, las palabras de felicitaciones iban y venían. Nos sentíamos llenos de paz y tranquilidad por aquellas palabras del juez.

Al menos ellos.

 Intenté sutilmente separarme de mis amigos para buscar a Taehyung pero ya no estaba. Su lado estaba como si nunca hubieran estado ahí. Intacto, limpio. Nada ni nadie en este. ¿Acaso se sintió como yo?

Dime Taehyung, ¿Acaso te sentiste vacío? 

—Tienes que darle tiempo —Namjoon me dio dos palmadas en el hombro y se fue a hablar sobre donde iríamos a celebrar.

¿Por qué no nos sentíamos satisfechos? ¿cómo te sientes, Taehyung?

《 17 》

—¡Salud! 

Empezamos a brindar por la reciente victoria; estábamos en un pequeño restaurante, un poco apartados de todo. El ambiente era algo cálido, pero elegante y cada mesa era bastante íntima. Todos ya teníamos nuestro plato servido. Nuestras caras eran de felicidad.

¿Así hubiese sido tener una cita algo improvisada con él? ¿Estaríamos de esta forma si nada hubiese pasado?

—Chanyeol, todo esto es gracias a ti —Seokjin dio el primer trago y todos le seguímos. —Está noche es muy especial, por fi-

—Jin corta el rollo, se nos enfría la comida y creo que nadie quiere hablar más de ese degraciado—tras reirnos del comentario de Jimin empezamos a comer.

Fue una noche agradable.

 Saliendo para regresar a nuestros hogares, Namjoon me comentó que es mejor dejar a Taehyung por esta noche. Mañana sería un nuevo día y hablaríamos con él. Corín y Hoseok se habían puesto en plan muy romántico por lo que también me ofreció dejarme dormir en su casa; Jin ya estaba dormido de lo ebrio que estaba.

 El camino sin Jin hablando tonterías cuando tiene sueño hizo que fuese muy silencioso. La entrada a su mansión me recordó a la primera vez que vi la de Taehyung. La entrada llena de flores que seguro cuidaban mucho entre los dos, el camino largo antes de entrar a la mansión, lo majestuosa que se veía la entrada.

Mi vida era, es y siempre será Taehyung.

Taehyung, Taehyung, Taehyung.

Todo es él, ¿por qué no podemos estar malditamente en paz? Sé que nuestro comienzo no fue el mejor. Sé que mi estadía ahí no era la mejor ¡Demonios! ¿por qué no podía simplemente ser feliz? ¿Será que es tanto pedir...?

—¿Qué sucede? —Namjoon cargaba a su pareja en el hombro mientras esta seguía dormida. Me miraba confundido, ¿dije lo último en voz alta?

—Nada, yo-, s-solo dime donde voy a dormir.

Mire la decoración. En definitiva tenía un toque de Jin en todas partes. 

—En la habitación de Jinnie, claro —le dio unas palmadas a el trasero de Jin y este solo murmuró unas palabras poco comprensibles —Él dormirá conmigo.

—Él tiene una habitación propia? —asintió —¿tu no le has...?  

—¿Pedido matrimonio? No. Jinnie y yo tenemos la costumbre de que no deberíamos dormir juntos hasta ser esposos. ¿Tú y Taehyung lo hacían?

Hacían.

—Sí... 

—No me extraña, teníamos las misma creencias, sin embargo, él llega a ser un poco posesivo —Namjoon rió un poco cortado mientras cambiaba a Jin de posición, ahora lo cargaba estilo princesa. —Me recuerda a cuando me dijeron que cuando le compraban un juguete o ropa nueva, se iba a la cama con él y era un lió quitárselo.