Saint Omegaverse: Entre alphas y Betas (Hyoga x Shun) #afro2018 FINALIZADA

Capitulo 7: "El peor y mejor error"

Ha pasado casi un mes desde que Shun perdió la memoria.

Él ha vuelto a aprender como utilizar los palillos, como pelear, como limpiar, como cocinar... Aprendió nuevamente lo que él ya podía hacer magníficamente.

Y junto a él yo aprendía a como aceptar mis errores.

Tal vez sea un error y tal vez el más grande que pude haber cometido en mi vida.

Shun se encuentra practicando sus técnicas de pelea con Ikki como su instructor.

Mientras ellos mantienen toda su atención en su entrenamiento improvisado, yo me mantengo sentado observándolos.

El cuerpo de Shun se mueve espléndidamente.

Ikki atacó a su hermano, este solamente se limitó a esquivar ataque tras ataque.

-¡Vamos Shun! ¡Golpeame de una buena vez! - Exclamaba su hermano desde el otro lado del jardín.

-¡No! - Gritó - ¡No quiero seguir peleando con usted!

-¡Sí no lo haces algún día terminaras muerto! - Al parecer Ikki estaba aprovechando esta situación para reeducar a su pequeño hermano.

-¡Eso no pasará! ¡Seré lo suficientemente fuerte para vencer a mis enemigos sin la necesidad de matar a nadie! ¡Seré igual de fuerte que mi hermano, Ikki!

-Shun...

-¡Y sí ocurre lo contrario entonces estaré complacido que me conviertan en mil pedazos!

Mientras yo observaba la escena, no pude evitar sonreír.
Es el mismo Shun de siempre, con un poco de esfuerzo podemos hacer que vuelvan sus recuerdos sobre nosotros.

El entrenamiento continuó, Shun atacaba sólo cuando veía su vida peligrar.

Pero de repente este empezó a colorarse, estaba a punto de pedirle a Ikki que se detuviera.
Cuando Andromeda cayó al suelo.

-¡Shun! - Exclamé junto a Ikki mientras corríamos hacia él.

Mientras más nos acercábamos era más fuerte su olor. No había duda, este había entrado en celo.

En cuento las hormonas tocaron las fosas nasales del Fénix; este aceleró el paso.

Sabía que sus intenciones no eran buenas, así como las mías tampoco.
Pero, no dejaría que nadie más lo poseyera.

El cielo me concibió el regalo de ganar la carrera y conseguir mi premio.

Tomé a Shun y corrí para no ser atrapado y asesinado por mi competidor.

-¡HYOGA! ¡REGRESA! - Gritaba mientras intentaba alcanzarme.

-¡Se trata de tú hermano de sangre, Ikki! ¡REACCIONA! - Le exclamé sin detener mis piernas.

Sin embargo este no detuvo su carrera y por consiguiente yo tampoco.
El caballero que mantenía en mis brazos empezaba a gemir.
Sentí como mi rostro empezaba a quemar.

Genial...

Perdí de vista al enfurecido Fénix.
Me encerré junto a Shun en mi habitación.
Lo recosté, y me senté en una esquina.

No podía salir de la habitación que se había transformado en mi fortaleza, sí lo hacia, corría el riesgo de ser asesinado por Ikki, pero el quedarme aquí seguía siendo peligroso.

✦✦

-Ese pato... Cuando le ponga las manos encima. - Refunfuñaba una y otra vez por todos lados.
-Se llevo a Shun, ese pervertido.