El Comienzo
-El amor es como un laberinto, que para encontrar el camino correcto, hay que equivocarse varias veces hasta acertar con la decisión adecuada, pero cuando termina el único deseo es volver a iniciar y perderte en él-
En una ciudad de las costas del Ecuador se encontraba una chica, Liad, la cual era admirada por las personas que la rodean, por su carisma y desenvolvimiento en sus estudios; ella al igual que todas las chicas de su edad asistía a la escuela, en donde tenía amigos con los que interactuaba diariamente; un día mientras habla con unas de sus amigas vio a un chico de un grado superior, en lo que sus amigas se percataron de aquella situación comenzaron a conversar:
-Preguntó Mel asombrada- ¿te gusta ese chico?
-Liad confundida afirmó- no como me va gustar si recién lo veo...
- Dayana intrigada- no te hagas bien que te gusta -con una sonrisa en la cara-
-Liad avergonzada- no nada que ver solo me parece simpático.
-Responde Mel asombrada- es mi primo,si quieres te lo presento.
-Dayana-Liad- (asombradas le quedaron viendo)
-Preguntó Liad un poco molesta- ¿Por qué nunca nos dijiste que tenías un primo en el colegio?
-Mel, empezó a recordar- ...Primo ¿cómo te sientes para el primer día de clases?
-Joad egocentricamente indicó- ¿Cómo me siento? sabes que siempre un inicio de clases es aburrido, ¡ah! A menos que hayan alumnas nuevas...
-Mel agobiada resaltó- tú como siempre pensando en eso, ¿Cuándo cambiarás?
-Joad con el mismo tono egocéntrico recalcó- Así que ya sabes presentarás a tus amigas, a ver si te consigo una prima.
-Mel alterada respondió- no, no te voy a presentar a nadie, es más, ni te voy a nombrar -término de recordar-.
-Mel desprendidamente respondió- no dije nada porque no me habían preguntado.
-Disgustada indicó Dayana- eso no es algo del que debemos preguntar, tú tienes que contarnos
-Liad anonadada exclamó- ¡es verdad!
Luego de aquella conversación que tuvieron en la tarde, Liad pasó toda la noche pensando en Joad, y en qué hacer para hablarle al día siguiente y no arruinar la situación.
Al otro día Liad mientras pasaba con sus amigas el recreo, de sorpresa le cae un balón en la cabeza y con eso también llega Joad, el cual le pide disculpas por lo sucedido, Liad vio la oportunidad adecuada para hablarle:
-Liad avergonzada manifestó- no te preocupes, ten tu balón.
-Generosamente dijo Joad- gracias amiga
-Liad ruborizada preguntó- ¿y cómo te llamas?
-Desprendidamente respondió Joad- me llamo Joad y tú (bota el balón a sus amigos).
-Sonrojada dijo Liad- mi nombre es Liad, mucho gusto.
-Joad entusiasmado indicó- el gusto es mío, ¿quisieras salir hoy para conocernos mejor?
.... Esto fue lo que Liad pensaba que iba pasar cuando Joad se acercó a pedir disculpas pero lo que en realidad pasó fue:
-Joad avergonzado dijo- ¿me pasarías el balón por favor? Y perdón por el golpe
-Liad ruborosa devuelve el balón- claro aquí tienes, no te preocupes suele pasar.
(Joad se retira del lugar)
Las amigas de Liad empezaron a molestarla por la situación en la que se encontró, y ella solo agachó la mirada la cual estaba enrojecida y se dirigió al baño; una vez ya en el baño se puso a pensar en: "¿por qué no le hable?, tuve la oportunidad y la desaproveche".
Liad llegó a su casa y en su tiempo libre se sentó frente a su espejo y se puso a reflexionar en que le diría la próxima vez que intercambiaran palabras y cuál sería la estrategia para llamar su atención sin ser tan obvia, para lo cual iba a necesitar la ayuda de Mel, ya que ella sabía más de Joad porque era su prima. Liad lo único que anhelaba era comprobar si Joad no era del típico chico machista que no sabía cómo tratar a una mujer y de esa manera saber si era el indicado o no, esperando que todos sus esfuerzos valgan la pena y no defraudarse a sí misma.
A partir de ese día intento acercarse un poco más a Joad pero sin mostrar interés alguno, para que sus amigas no le digan nada al respecto. Un día inesperado mientras salía de clases Joad se acerca a molestar a su prima y de paso a Dayana y a ella, Liad se sintió rara, puesto que Joad nunca se había comportado así con ellas; mientras Joad las molestaba se le quedo viendo a Liad y le dijo:
-Joad de una forma cargosa resaltó- tú eres la chica que golpee ese día con el balón en la cabeza ¿cierto?, en este momento me deberás estar odiando por eso.
-Liad ruborizada contestó- no, no te preocupes eso ya paso y yo no soy una chica rencorosa.
Desde ese día empezaron a llevarse bien y a compartir más momentos juntos, Liad comprobó que Joad no era como todos los hombres que había conocido, pasaron los meses y su amistad se iba haciendo cada vez más y más fuerte, pero Liad iba sintiendo algo más que un cariño hacia Joad, sin embargo él no lo notaba. En cada encuentro de ambos siempre se molestaban riéndose el uno del otro, se podía ver a lenguas la conectividad que tenían. Después de un largo día de pasar molestándose en el recreo termino y al entrar a su aula Dayana la sujeta y le dice: <tengo algo urgente que contarte>.
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¿Repetimos la Película?
Teen FictionEn la vida no todo lo que nos gusta es bueno, pero no todo lo que no nos gusta es malo, a veces hay que aprender a caer para saber cómo levantarnos y que para la próxima vez tengamos experiencia de cómo hacerlo y no demorarnos tanto.