TORMENTA DE EMOCIONES (CACHÉ)

Este es el momento

-poché-

Salimos de la habitación y vimos que Camila nos estaba esperando afuera.

-Lamentos dañarles el beso pero la gente espera por ti poché- al decir eso nos saco una risa.

Me dirigí a mí amigos y al rato de unas horas ya el alcohol me estaba haciendo efecto, yo no soy de las personas que toma pero cuando tomo me emborracho muy rápido.

Ya eran aproximadamente las 3 de la mañana y ya muchas de las personas a las que habían invitado se habían ido solo quedábamos calle, Camila, Johan que era un amigo muy cercano, Mario el siempre había estado enamorado de mi y siempre me coqueteaba y yo.

A Camila se le ocurrió la maravillosa idea de jugar verdad o reto, cojio una botella vacía de vodka y la empezó a girar, luego que varias rondas nos tocó a Mario y a mí.

- Verdad o reto?- Dijo Mario

- Reto-

- Te reto a qué me beses- Al escuchar esto quede plastamada, no sabía qué hacer o decir y mire a calla y ella estaba igual que yo.

-Solo un beso no seas agua fiestas, ni que estuvieras de novia con calle- Dijo Johan al ver que mire a calle, en ese momento lo quería matar por decir eso, el no sabía lo que estaba pasando.

Yo a la única persona a la que le quería dar un beso era a calle y no podía.

- Entonces dale un beso a calle - Dijo Johan- Ustedes son mejores amigas, un pequeño beso no implica nada.- en ese momento estaba segura de que mataría a johan-

- Dale poché un pequeño beso a Calle- Dijo Mario.

Yo no sabía qué hacer a si que mire a calle y le pregunté al oído para que nadie escuchara.

- Está de acuerdo?- le dije

- Obvio, con mucho gusto- me dijo con una sonrisa picara.

-calle-

Cuando poché me preguntó si estaba de acuerdo con el beso le dije que si ya que solo era un reto y no creo que nadie sospeche.

- Ok, le daré el beso a calle - Dijo poché.

Se acercó a mí lentamente y depósito un beso muy suave en mis labios y nos quedamos así hasta que Mario dijo:

- Bueno muchos besos por hoy, gracias poché- Dijo Mario, se veía un poco celoso lo que me dio risa.

Nos quedamos hablando y aproximadamente a las 4:30 de la mañana Mario y Johan se fueron.

Le pedimos a Camila que se quedará a dormir en la casa de poché ya que nos la llevamos muy bien, nos quedamos hablando viendo series hasta que nos quedamos dormidas.

- Camila-

Me desperté y vi que calle y poché seguían durmiendo y aparte estaban muy abrazadas, la verdad es que se me hacen una hermosa pareja.

Me levanté y me dirigí a la cocina, abrí la naviera y estaba vacía ya que en la fiesta habíamos acabado con todo. Me vestí, baje a la tienda y compre cosas para el desayuno mientras las tórtolas seguían durmiendo.

Llegue al apartamento y note que poché ya se había levantado.

- Buenos días, pitufa-

- Buenos días Cami, cómo dormiste?- Me Preguntó

- Super, aquí traje para que tú hagas el desayuno.

- Yo? Yo soy pésima cocinando tu sabes - Me dijo y en ese momento calle estaba abriendo los ojos.

- Yo traje el desayuno, ya hice mi parte- Dije y mire a calle que ya se había incorporado y estaba sentada en la cama.

- Buenos días bebé - Le dijo poché a calle mientras se acercaba y le depositaba un beso en sus labios.

- Lo siento, se ven muy lindas juntas pero yo tengo habré- Les dije y se rieron.

- Yo hago el desayuno - Dijo calle.

-calle-

Me pare de la cama, fui hacia la cocina y empece a hacer el desayuno mientras Camila y poché limpiaban la casa de todo el desorden que habíamos echo a ayer.

Cuando termine de hacer el desayuno las llame para que se sentarán a comer, hice unos panqueques con huevo y fruta.

Amaba que con Camila podía ser quién soy realmente, podía decir muchas bobadas, hablar de cualquier tema y ser normal con poché.

Al terminar de desayunar Camila se fue ya que tenía que irse para su casa.

Y hay estábamos poché y yo solas otra vez, ella tenía una camisa holgada con unos pequeños shorts que dejaban ver casi todas sus piernas y no me hacía responsable si algo pasaba en esa habitación.

Me acerque a ella por detrás y la agarre de la cintura, se voltio quedando frente a frente y me empezó a besar, empezó como un beso lento y luego se fue intensificando, sentí su mano por debajo de mi camisa lo que hizo que mi respiración aumentara.

Nos fuimos así hasta su cama, en ese momento yo ya estaba en cima de poché, cojí su camisa, se la quite y quedo con su parte superior desnuda ya que no traía brasiel, en ese momento su respiración y la mía ya estaba a otro nivel.

Escuchamos que tocaron la puerta.

- Calle soy yo tú papá, sé que estás hay.

Al escuchar esto salte de la cama y poché se puso la camisa de una manera muy rápida y abrí la puerta.

- Hola papá - Dije con la respiración todavía agitada.

- Veo que poché si estaba borracha ayer- Dijo mi papá.

- Por que lo dices? - Le preguntó poché .

- A menos de que el nuevo estilo sea ponerse una  camisa al revés, creo que estabas borracha-

-poché-

Al ponerme la camisa tan rápido no me fijé y me la puse al revés, en ese momento quería desaparecer.

- Como te parece el apartamento? - Le preguntó calle a su papá para desviar el tema.

- Creo que es mi favorito del edificio, por qué no me dijiste que ibas a vivir aquí, te hubiera echo una oferta.

- No sabía que usted era el dueño del edificio, calle me lo dijo cuando llegamos.

- Tu y calle son muy unidas no? A veces creo que son novias- Dijo con humor.

Mi corazón al escuchar eso se aceleró y al ver a calle sabía que estaba igual de nerviosa que yo.

- Si, somos muy unidas- le dije.

El papá de calle fue al balcón a ver la vista, calle se me acercó y me dijo:

- Este es el momento.

- Momento para que? - le pregunté confundida.

- Para decirle lo de nosotras, pues si quieres- Me quedé un segundo pensando y le dije.

- Obvio que quiero -

- Papá ven, necesitamos hablar- Le dijo calle y mi corazón se quería salir, no sabiamos como iba a reaccionar.