08- V

19 5 3
                                    

Luz.

Ayer ocurrió algo diferente, he visto a un chico que no era de aquí.

Cuando el tren me arrolló y volví a aparecer en mi habitación corrí para contarle a todo el mundo lo que había pasado, pero nadie me creyó. Como siempre, volvieron a decir que estaba loco, que necesitaba un psicólogo urgentemente.

Pero aquello era demasiado real como para ser una ilusión, él estaba helado, parecía tan perdido en todo aquel remolino de acontecimientos. Sus ojos estaban llenos de inocencia y lloró, lloró por mí. No me conocía de nada y quiso ayudarme.

Ni siquiera sé su nombre, pero quiero volver a verlo, en cierto sentido siento que una pequeña parte de él sigue conmigo, acompañándome.

He pasado horas y horas intentando entender quién es, o de dónde salió, ¿por qué estaba allí? Lo añadiré a mi lista interminable de preguntas.

Hoy he vuelto a ir al estanque a las afueras, supongo que a por respuestas; cada vez me llama más. Ahora sus aguas están enturbiadas y su calma parece estar perturbada siendo agitado por ondas constantes, como si alguien lo estuviera revolviendo; pero allí no hay nadie más que yo. Quizá la respuesta está en su interior, sea como sea, lo averiguaré.

Siento que estoy avanzando en esto, no sé como, pero puede que ya vea la luz al final del túnel, o en este caso, al final del estanque.

~~~V~~~

EtéreoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora