-interrumpimos algo..?-
Aquellas palabras los había dejado completamente helados, se trataba de nadie más que Whis y a su lado Kibito. Bills reaccionó rápidamente y soltó a Shin haciendo que callera al suelo, se puso derecho y actuó como si nada hubiera pasado.
-Te equivocas! Aquí no está pasando nada! Jeje..- Respondió y sonrió falsamente para que pudiera creerle.
- Auh..-
Se escucho del más pequeño de hay que se había golpeado la cabeza, sin perder el tiempo se puso de pie y le siguió la corriente al Mayor. -Claro jajaj no pasa nada- Logró decir con una sonrisa un tanto nerviosa.
-ya veo.., bien Señor bills, debemos irnos, tenemos cosas importantes que hacer- Dicho esto se acercó al Dios y le regalo una sonrisa -Gracias por todo, nos veremos luego-
-Oh esta bien.. vámonos ya- Dijo para sujetarse del brazo de Whis
Shin se posicionó al lado de Kibito y Se despidió de ambos que partían, Bills antes de desaparecer miro al kaio pequeño y le sonrió suavemente a lo que el kaio se sonrojo y devolvió la sonrisa alegre. Cuando desaparecieron Shin no pudo evitar sonreír embobado recordando lo que había pasado, pero trato de evitarlo, ya que no quería admitir lo que sentía.
Pasaron algunas horas, Shin se encontraba en el Río, observando detenidamente hacía tan cristalinas aguas, escuchar el chocar con las pequeñas rocas, la brisa tan cálida lo hacía sentir tan relajado, se dejó llevar por un momento, cerrando los ojos, y respirando profundamente, todo era simplemente perfecto.. El pensaba que podría ser aún más perfecto, si sólo tuviera a tal Dios destructor a su lado.
En el planeta de Bills.
El Dios se encontraba en su "habitación" recostado en su cama, estaba por quedarse dormido, por primera vez no quería, la duda lo consumía poco a poco, Si no descubría que rayos pasaba con el Kaio, lo mataría, claramente no va hacerlo, no tiene pensado morir aún.
- Señor Bills?- Hablo Whis que había entrado hace un momento.. - Señor, Goku y Vegeta vendrán por su entrenamiento, de verdad que no dejaron de molestar así que accedí a que entrenarlos, quiere ir con nosotros o Sólo irá a dormir?-
-Mm.. no gracias- Pensó un momento y volvió a hablar -Whis.. podrías llevarme al planeta de los Kaio?- Pregunto un tanto nervioso
-Quiere ir al planeta Sagrado? Ohjojo! Esta seguro?-
-Claro que si! Sólo llevame y no hagas preguntas!- Dijo ya alterado
-Como diga señor.., sujetese de mi -
Y así ambos fueron nuevamente al planeta de los Kaios, sólo por que Bills lo había pedido, no se sabía exactamente por que, y para que, sólo quiso y ya. Luego de haber llegado se dirigieron al Templo encontrándose con Kibito.
-Hola! Lamentamos interrumpir lo que sea que estén haciendo..- Hablo el ángel
-Oh, buenas tardes señores, a que se debe su inesperada visita?- Responde Kibito haciendo una reverencia..
-Vera..nesecito entrenar a unos sujetos en mi planeta y.. el Señor Bills no se encuentra muy bien así que me preguntaba si se podían hacer cargo de él..Mientras me mantenia ocupado- Excusó Whis mirando a Bills mientras le guiñaba el ojo
-Oh.. de verdad se siente tan mal?- Pregunto un poco confuso el Kibito
-Asi es.. *cof cof* no se lo que me pasa- Respondió el Dios dramáticamente
-Esta bien Señor, le prepararé un cuarto para que se relaje.. sigame- Dicho eso se hecho a caminar
-Que se divierta señor.!-
-Ya vete de una vez..-
-Como diga, Pasaré por usted en la noche- Después de decir aquello el ángel desapareció y el Dios destructor se encamino junto a Kibito hacía la habitación.
Bills se encontraba algo nervioso, no podía creer que Kibito había caído en tal estupidez, dejó de lado las dudas y se adentró al cuarto
-Aqui podrá descansar, quiere algo de comer Señor?-
- No gracias sólo voy a...Nyaaa.. dormir- fingió un bostezo para que el otro se fuera de una vez
-Si Señor Bills, me retiro, llámeme si necesita de algo..-
Una vez que el Kaio se había ido, se empezó a preguntar por alguien más...
- Mmm.. donde estará Shin? No lo vi con Kibito.... Bueno iré a buscarlo, no pierdo nada haciéndolo-
Bills decidido salio de cuarto, vigilando que Kibito no lo viera y comenzó a caminar lejos de hay. Luego de un rato caminando pude ver una silueta parecida a la que buscaba.
-Ahi estas...-
Camino a pasó rápido, una vez detrás del Kaio decidió jugar con el, tapándole los ojos y diciendo:
-Adivina quien soy..-
Shin si habérselo esperado pego un salto del susto y tocó las manos ajenas que le cubrían sus ojos, temia que fuera al que esperaba en su mente..
-Se-señor Bills..?-
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Continuará..
