Tired of you.

Sin & Sweet.

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Hola a todos,  después de un mes les traigo el nuevo capítulo esta vez con el MuraHimu... Les advierto que contiene un poco de Hetero y algo de... Pedo*ilia... Así que ya saben si no les gusta o les llama la atención no lo lean.

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Quien conociera a Murasakibara Atsushi no creería que este se hubiera casado a la temprana edad de 27 años,  esto debido a su peculiar forma de ser,  el peli morado era un ser con una personalidad un tanto extraña. Su familia y amigos se habían sorprendido cuando llegó de estados unidos junto a una espectacular rubia de la misma edad,  Alexandra,  era su nombre.  

El día de su boda fue una ceremonia tranquila,  aunque había más conocidos por parte de Atsushi, su numerosa familia y amigos. Por parte de Alex,  solamente estaba su hermano menor,  Tatsuya,  un hermoso doncel de 17 años,  este y la rubia habían perdido a sus padres en un accidente así que solamente se tenían ellos.

Luego de su luna de miel,  la vida en “Pareja” comenzó,  aclarando que eran tres los que vivían juntos,  Atsushi,  Alex y Tatsuya,  este último al ser mejor y no tener más familia se veía en la obligación de vivir con ellos,  había dado la idea de vivir en el dormitorio de la escuela pero su hermana y su cuñado se habían negado rotundamente.

Una mañana Atsushi estaba haciendo el desayuno para su esposa y Tatsuya,  sabía que Alex era mala para despertar temprano asi que solo le adelantaba algo y lo dejaba en el microhondas,  Tatsuya por su parte bajó a la cocina con un pantaloncillo que apenas le cubría y una camisa manga corta color blanco.

-Atsushi, buenos días. - saludó en su tono habitual,  se acercó al refri y sacó la leche.

El peli morado le contestó sin mirarlo,  cuando fue a poner los platos notó cómo el joven doncel se inclinaba para buscar algo más, no iba a negarlo,  Tatsuya era hermoso pero hasta ese momento se había dado cuenta de aquel voluptuoso trasero y finas piernas.  -A… Aqui esta el desayuno… - susurró aún mirando al pelinegro.  

Tatsuya dejo la leche y al no encontrar nada más en el refri cerró la puerta,  Atsushi posó si vista en su desayuno y actuó normal.  -Se va a enfriar.-

-Oh… Claro,  gracias. - dijo el joven.  -Esta noche llegaré tarde,  me invitaron a una fiesta después de clases.  - dijo tranquilo comiendo una tajada de pan.  

-Eh? Después de la escuela?  - preguntó Murasakibara viendo a los ojos a Tatsuya.  

-Si… Mañana es sabado asi que… - levantó los hombros restando importancia.

-¿Ya le dijiste a Alex? - Preguntó el más alto,  Tatsuya negó.  - Ella es la que decide.  -

-Bueno… Solo le comentaré,  voy a ir de igual manera.  - respondió.

Atsushi suspiró,  sabía que Tatsuya hacía lo que quería y no estaba acostumbrado a pedir permiso,  cómo un típico adolescente americano. -Por lo menos comentale.  - le dijó al menor.

La mañana termino y Tatsuya salió para el colegio. Atsushi al ser el dueño de una exitosa pastelería no tenía afan en llegar a si trabajo,  subió a su habitación para encontrarse a Alex dormida y desnuda. Se acercó lentamente a su esposa y se recostó encima de ella,  claro,  con cuidado de no aplastarla.  

-Hola… - murmuró Alex,  acomodándose para dejar a Atsushi entre sus piernas,  torneadas y ligeramente bronceadas.

-Buenos días,  dormilona.  - susurró Atsushi.