Un amor inesperado

Capitulo 15

Percy:

Caminé por el barco pensando una y otra vez en lo que acababa de suceder, mis sentimientos por ella eran puros, pero no podía dejarme llevar por lo que sentía por mis amigos y por el miedo que sentía de que ella no sintiera las mariposas que yo sentía en el estomago cuando estaba cerca, también pensaba en la misión ¿Cómo reaccionaría mi mejor amigo? Seguro que se enfadaría mucho porque yo iba a negociar y lo hice pero me metí en una misión, Jason seguramente pensaría que nos metí a todos.

Me coloque en el bordillo del barco, aspiré el olor a mar que tanto me encantaba, mire al horizonte oscuro, pensé en lo que hubiera ocurrido si no hubiera conocido a Annabeth en la fiesta, ahora yo estaría en un barco más pequeño que este y no habría puesto a mis amigos en peligro, me parecía sub real el recuerdo de la fiesta parecía que habían pasado años, desde que conocí  a Annabeth no me arrepentía de haberlo hecho, pues me brindó la oportunidad de conocer el sentimiento que hizo que mi padre no cumpliera su sueño y era hermoso nunca había estado tan contento desde que conocí a mi preciosa rubia, de lo que me arrepentía era en meter en este lío a Jason, mis pensamientos se vieron interrumpidos por un carraspeo a mis espaldas.

Cuando me voltee vi a Thalía detrás de mis sonriendo, se coloco a mi lado y aspiro profundamente.

- ¿Pensando en todo? - Preguntó.

- ¿Cómo lo sabes? -

- Yo también vengo a pensar aquí de todo de lo que me atormenta - se sinceró ella.

- A la gran Thalía Grace que no le teme a nada ni a nadie ¿Le atormenta algo? -Me burle.

- Tengo un pasado doloroso Percy - otra con un pasado doloroso, ¿Todas las chicas tienen un pasado misterioso?

Observe a Thalía, sus ojos azules eléctricos tenían la misma expresión que tenían los ojos de Annabeth cuando menciono su pasado, algo hizo un clic en mi cabeza, los amigos que hizo Thalía en su viaje eran Luke y Annabeth, ella y mi rubia compartían ese pasado tan doloroso.

- Annabeth y tú - ella me miro confusa.

- ¿Te dijo su verdadero nombre? - Yo asentí.

- Annabeth y tú - repetí.

- ¿Annabeth y yo qué? -

- Tú y ella no se separaron mientras que Luke si lo hizo - ella me miro y en vez de gritarme como pensé que haría ella solo sonrío.

- Lo has descubierto, pensé que el primero en hacerlo sería Jason, ya que es el más inteligente, pensé que tendría que explicártelo paso a paso - sonrío y yo solo reí.

- ¿Qué paso para que las dos os cerréis tanto? - Pregunté con curiosidad.

- Percy no me gusta hablar de eso, además yo no soy quien te lo tiene que contar - y con eso se fue dejándome solo.

Me quede allí, ¿Minutos, Horas? No sé exactamente cuánto tiempo pasó, pero salí de allí buscando a mis amigos para darles las noticias, vi a Clarisse no me apetecía hablarle, pero era la única forma de encontrarlos así que me acerque.

- Clarisse... -

- Para ti tercera de abordo Clarisse - me interrumpió.

- ¿No eras segunda? -

- La segunda de abordo siempre ha sido Thalía - respondió.

- Tercera de abordo Clarisse ¿Dónde están mis amigos? -

- ¿Quién? -

- Los prisioneros -

- Ahhh, están en la bodega viendo los cañones con los Stoll -

Salí dando zancadas del lado de Clarisse, no me gustaba nada esa chica.

La luna estaba en lo más alto del cielo nocturno acompañada de las estrellas, en mi pueblo no se podía ver semejante cielo estrellado, y creo que habían aparecido nuevas constelaciones.

Baje a la bodega y los encontré allí oyendo la explicación de cómo funcionaban los cañones por parte de los hermanos Stoll, Jason fue el primero en verme y me saludo, habló algo con los chicos y los Stoll y todos menos los piratas vinieron a mi dirección, Jason me cogió del brazo y todos caminamos, desconocía a dónde íbamos pero los seguí.

Entramos en un camarote, estaba pintado de azul y un millón de peces estaban dibujados por las paredes, había un escritorio de madera con una lámpara, las sabanas de la cama eran azules cielo con nubes blancas de algodón ¡Esa habitación estaba hecha para mí!

- ¿Y bien? - Preguntó Jason ansioso.

- ¿Y bien qué? - Pregunté.

- ¿Cómo ha ido la negociación? -

- Ahh, ha ido... bien, como la seda - les di una sonrisa forzada.

- ¿Entonces nos liberarán? - Preguntó esta vez Silena.

- Sí y no - respondí.

- ¿Cómo que sí y no? - Preguntó la morena.

- Explícate Percy - dijo Jason frunciendo ligeramente el ceño.

- A ver, hice un trato -

- ¿Qué trato? - Pregunto el

- Eso da igual lo importante es que mientras estemos aquí dormiremos en las habitaciones, no volveremos a los calabozos y cuando cumpla el trato nos soltaran - explique, Silena y Beckendorf sonrieron, pero como me temía mi mejor amigo estaba serio.

- ¿Te has asegurado de tener un contrato o algo por el estilo para asegurar que cumplan su palabra? -Todos me miraron expectantes y mi cara lo decía todo, pero respondí igualmente.

- No -

- ¡¿Cómo no has pedido algo tan simple?! - Gritó mi mejor amigo.

- Confió en ella -

- Tú lo dijiste Percy, los piratas no son de fiar -

- Ella sí lo es -

- Te estás guiando por los sentimientos -

- No, no lo hago -

Mientras discutíamos los dos chicos restantes miraban con cada argumento al que lo decía.

- Percy se lo que estas pasando, yo también estoy enamorado de ella, es mi chica ideal, pero resulta que es una pirata, además mi hermana esta aquí, te comprendo, pero a veces hay que pensar con la cabeza y no con el corazón -

- Jason no soy como tú, a mí no me criaron para separar los sentimientos a ti sí, pero con esto no me equivoco, te lo juro -

- Pero... -

- Jason ¿Confías en mí? - Le interrumpí.

- Sí -

- Confía ahora, pues no me equivoco -

- Confiare solo por ti, pero si no se cumple te lo recordaré siempre -