Crónica de un corazón roto

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Crónica de un corazón roto


Las estrellas caen de lo alto del cielo,

lentamente yo me desvanezco

entre sueños e ilusiones mi corazón se desintegra

y uso la noche de pretexto

para perderme con los recuerdos tuyos,

porque aun hoy yo siento que estas aquí sujetando mis manos

como aquella vez en que el amor nos hizo suyos

frente al espejo del umbral de nuestras almas

nos encontramos miles de veces el uno al otro

desprendiéndonos de lo que nos estorba,

conectando cuerpo, alma y corazón

hasta olvidarnos de todo y quedarnos sin respiración.

A tu lado las noches eran cortas y sublimes

las madrugadas sabían a poseía

y mi ventana era cómplice del amor que emanábamos

frente a la luna me decías que a mi lado yo te calentaba como un sol

y yo para no perder la lírica

te decía que a tu lado mi alma estaba llena,

y es que el amor nos encontró en una esquina fría

y allí mismo nos devolvió sin previo aviso

sin importarle que mi corazón ahora está roto

y lo peor de todo es que la soledad si acepta devoluciones.

Ahora dueles y no puedo decirte cuanto

porque hablar de tu nombre es hablar de aguijones

más yo que no aprendí a olvidar

y te busco en el universo

con lo mal que me hace ver por mi ventana

distingo el reflejo de tus ojos en la luna plateada

reflejos que contrastan con mi eclipsado corazón

porque aun hoy en esta noche serena

mis sentimientos se agitan al escuchar tu voz

esa voz que aparece en el silencio

y se convierte en gritos que rompen los cristales de mi ventana

cortan mis venas, se desangra mi vida

y los fantasmas del dolor penetran mi alma

convertidos en insomnio que no me dejar dormir,

imposible se me hace respirar

porque aunque suene ilógico tú eras el oxígeno de este lugar

tu, yo y el presente en nuestras manos era todo lo que importaba,

ahora que decidiste irte para buscar algo que encaje perfectamente

con lo que tú no conseguiste conmigo

me dejas a la deriva,

te vas así como las aves inseguras de sí mismas

emigran acobardadas cuando llega el invierno

mas yo me quedo aquí y no puedo odiarte

porque al final de cuentas el amor también es dolor

pero tu que no sabes lo que quieres

siempre vivirás engañando a tu propio corazón

saltando las estaciones, viviendo en círculos

y así solo puedo decirte que te vaya bien

que yo tomare tu adiós como un presentimiento de buen augurio.


By: HectorXp

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