«Me gustaría que respondieras ¨¡sí!¨, pero igual me gustaría leer un ¨no¨.
No quiero tenerte esperando, no quiero hacerte formular preguntas. Estoy muy consciente de que tienes muchas ahora, no quiero que tengas más, no quiero ser un problema más en tu mente.
Si estás leyendo esto, quiero que sepas que no habrán confusiones. Si lo lees, es porque así quisiste tú. Si te pregunté fue porque sentí que eso te ayudó un poco a pensar lo que soy capaz de hacer por ti; no estaba ofreciéndome a hacerlo por ti, lo hago porque quiero y me nace, pero vaya que lo mereces porque todo va dedicado a ti.
Cada palabra, cada pensamiento escrito, mis dedos danzantes y tu mente relajante, todo va por y para ti. Todo esto es lo que estoy pensando, todo esto está saliendo de mi mente y no quiero hablarlo, no es lo mismo.
Si es esto lo que necesitas, deberás consultarlo seguido, pues siempre estoy pensando en ti».
De N para F.
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Mil y un pétalos
Romance«No me gusta hacer promesas, temo a no cumplirlas. Sin pensarlo y sin saberlo, te hice una aquella noche de tristezas y lamentos». F.
