In The Past

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Aunque el tiempo pase, el destino te juntará con aquel que esta destinado a ti.

- Nada -

Miraba el reloj colgado de la pared. Las 10 de la noche. Erwin se hallaba viendo la televisión con Pancho en su regazo. Si, es un perro Parson Russell Terrier que lo trajo de Inglaterra.

Erwin vivió hasta sus 16 años en allá, luego estudió en el Conservatorio de Música en Ginebra, Suiza. Sabe tocar muchos instrumentos; pero los que más le gustan son el piano y el violín  Los padres del rubio eran muy ricos, así que nunca le falto nada, tuvo suerte para hacer realidad sus sueños.

Aunque él lo niegue, es un "prodígio"

Por mi parte, cuando me llevó a su casa, los padres del rubio me recibieron bien y me trataron como su hijo -aunque era el opuesto del primogénito- Siempre estuve agradecido por ellos. Me dieron todo lo que necesitaba y apuesto que me ofrecieron mas de lo que yo hubiera esperado.

Yo estudié para ser Barista. Como dije, mi obsesión por las bebidas calientes es muy grande.

Cuando Erwin se mudó a Ginebra me llevó con él. Para que tengamos una diferencia de 4 años es más responsable que yo.

—Pásame una porción de pizza, Levi.

La voz del mayor me sacó de mis recuerdos; entonces, me levanté de mi lugar para alzar una porción y cuando estuve cerca de él se lo arrojé en su cara.

—¡Oye, Enano!—Me miró con furia al principio pero luego cuando Pancho le lamió su rostro todo manchado se puso a reír. A mí me dió asco sinceramente.

—Ups, es que tus manos estaban ocupadas con Pancho, creí que tomarías la pizza con tu boca.— Rode los ojos y sonreí con algo de malicia.

Al final Erwin terminó por ir a darse una ducha mientras yo limpiaba el desastre que hice y metía su ropa en la lavadora. La travesura valió la pena.



♢•♢•♢•♢•♢•




—Heichou, ¿Cuánto de azúcar le gusta en su té?

—En lo posible sólo 3 cucharillas.—Me crucé de brazos y me apoye en la pared.

Mi subordinado colocó la taza en frente mío. La tomé entre mis manos y sople un poco.—Oi mocoso, debe ser 3/4 de agua caliente y 1/4 de fria; 3 cucharrilas de azúcar y revolverla a la izquierda, ¿entendido?

—S-si, discúlpeme Heichou...—Agachó la mirada mirando el suelo.

—Tch....—Dejé la taza en el escritorio y lo apegué a mi cuerpo acariciando su cabellera.—Deja de ponerte así por cosas simples... Sólo es un té.

El chico descansaba en mi hombro. Su respiración me hacia temblar ya que era un poco entrecortada. Mi corazón estaba aumentando el ritmo cardíaco cada vez más y más. Yo no soy alguien expresivo pero este chiquillo podía cambiar todo eso con solo respirar cerca mío.

—L-levi-san.... Puedo besarlo?

—Sólo uno, Mocoso...—El contrario se reincorporaba para mirarme y.....

La alarma me despertó con un ruido estruendoso que se escuchaba por toda la habitación.

Debería meterla a la licuadora. Justo cuando más la necesito no funciona y cuando menos quiero que me interrumpa, Ahh.... me la jodía siempre.

Lo mismo de siempre.

A punto de descubrir la cara del chico de mis sueños y pasa lo mismo de siempre.

Buscándote En Mi Nueva VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora