El Primer Linaje ᵏᵒˡ ᵐ

🍷𝗢𝗳𝗲𝗿𝘁𝗮🍷

Me quedo viendo el líquido ámbar de mi copa por unos momentos, concentrándome en la sensación de frío y humedad que comenzaba a invadir en mi mano por los hielos en la bebida.

— Soy toda oídos —  alzo mi vista hacia las tres personas frente a mi — Hablen.

— ¿Ahora resulta que nos darás ordenes? — bufa sin gracia Lucien, dedicándome una mirada furibunda

— No te lo tomes tan personal, Castel — respondo con recelo — Ustedes acudieron a mi

— Por favor, chicos —interrumpe Aurora con voz inquietantemente calma — Los juegos de niños pueden ser después.

Chasqueo la lengua y doy un pequeño asentimiento. Aunque esto no me tenga nada tranquila debo de conservar la calma ante ellos.

— La razón por la que te hemos llamado, [TN], — habló Tristán — es porque tenemos un plan para acabar con los Mikaelson, y al mismo tiempo romper el vínculo de los linajes.

— Y ¿a qué se debe tal deseo de pronto? 

Dejo mi copa a un lado, y me cruzo de brazos, alzando una ceja mientras lo observo.

— Digamos que muy recientemente los Mikaelson atacaron a alguien muy especial para mi , prometí vengarme, pero no por eso condenaré a todos los vampiros del mundo. Para eso, hay que quebrar la magia de los linajes antes. Eso deberías saberlo mejor que nadie.

Hace un año, cuando mataron a Finn fue cuando supimos que cada vampiro de cada rincón del mundo está unido a uno de los Originales, dependiendo de qué Original te había convertido o había empezado el linaje del vampiro que te transformó.

Ese mismo mes un dolor ardiente comenzó a inundar mi pecho, pude sentir la muerte misma llegar por mi, cuando de pronto, se detuvo. Poco después me enteré que unos niños en un pequeño pueblo de Virginia habían casi logrado matar a Kol. De no haber sido por sus hermanos.

Así que, por más que quisiera matar a Kol, mi destino estaba unido al suyo, y alguien que no fuera de su linaje le importaría muy poco terminar con todos nosotros.

En eso Tristán tenía razón.

— ¿Y cómo piensan conseguirlo? — pregunto bastante curiosa inclinándome hacia él.

—No pensarás que te revelaremos nuestros secretos tan pronto ¿o sí? — ríe Aurora, pero solo puedo quedármele viendo seria — Hemos estado investigando un largo tiempo, de eso no te preocupes 

— Nosotros en comparación tuya, [TN], hemos logrado crecer a lo largo de los siglos, no siendo el títere de otros, como tú.  — sonríe de manera vil Lucien tomando mi copa para beber de ella.

Como quisiera cortarle la lengua.

— No soy un títere — gruño, fulminándolo con la mirada

—¿Ah no? Entonces ¿Por qué  trabajas para Marcel Gerard?

— Basta — interrumpe Tristán antes de que pueda contestar — Si sigues molestando a [TN], Lucien, jamás acabaremos esta reunión.

Por favor, que alguien le cosiera la boca, le harían un bien a la humanidad.

— No entiendo en dónde encajo yo — me quedo pensativa, pues si tenían todo preparado no sabía cómo entraba yo.

— Justamente por tu posición con Marcel es que te necesitamos — respondió a mi duda — Sabes todo o la mayoría de las cosas que pasan en esta ciudad y ya que te ofrecieron poner al tanto a los Mikaelson de los cambios de la ciudad eres la infiltrada perfecta.

Así que saben sobre lo que me había pedido Marcel esa mañana, debo de fijarme más en quien esta al rededor.

— Entonces supongo que ustedes —  veo a los hermanos de Martel — serán los que se encarguen sobre el hechizo  — volteo a ver a Lucien — por tu hermosa reflexión la grandeza de los enemigos, serás quien proporcione las herramientas, y yo —  me levanto de mi asiento y camino al rededor del lugar — seré quien les informe.

— Veo que tienes experiencia en esto — dice sonriendo de lado Tristán.

¿Cómo se supone que debería de interpretar aquella sonrisa?

— Bueno efectivamente nos vas a proporcionar información, querida [TN], sobre todo lo que hagan los Mikaelson. No sabemos porqué específicamente decidieron venir los 4 a la ciudad, sería bueno saberlo.

— Wow que interesante — digo sarcástica, ser la chismosa nunca fue mi cosa favorita.

— Eso será solo el inicio. Si comprobamos tu lealtad tendrás tareas más interesante.

— ¿Cuándo tienen planeado hacerlo? — pregunto pensativa

— ¿El qué? — pregunta un poco confundido Tristán — ¿Romper los linajes? 

Asiento.

— Esperando encontrar todo lo que necesitemos para el hechizo. Planeamos hacerlo en el Mardi Gras.

El Mardi Gras es prácticamente el carnaval más famoso de Nueva Orleans. No sería hasta dentro de 4 meses. Nos encontramos a finales de Octubre.

— Bien —  me dirigí a la salida—  Gracias por la plática, lo pensaré.

Los tres se vieron entre ellos confundido por mi actitud.

Sé lo que pensaban, y sinceramente, me vale un carajo.

Abro la puerta y salgo al pasillo para subir las escaleras e ir de regreso al bar, cuando  siento la mano de Tristán tomando mi brazo. Su mirada era completamente serena.

— Si me sueltas — digo fulminándolo con la mirada.

— No debes de pensarlo mucho y lo sabes. — Su voz era tan...tranquila al igual que su mirada.

Pero con toda la intención de no dejarme ir hasta que le dé una respuesta.

— Escogieron un mal día para ofrecerme esto. — dirijo mi mirada a cualquier punto que no sea él.

— No, querida. Escogimos el día perfecto, solo piensa que te librarías de Kol y conseguirías lo que deseas 

— ¿ Y qué es lo que deseo? — suelto una pequeña risa sin mucha gracia

— Venganza — responde simple y sencillo — Como todos aquí.

Me quedo en silencio.
No solo se trataba de poder matarlo o que alguien más lo hiciera. Si no que mi vida no dependiera de la suya.

Era difícil de ignorar cuando habías estado a orillas de la muerte.

— Sabes que ya tomaste una decisión — dice finalmente soltando mi brazo

Y tiene razón.

Al llegar al bar saco mi celular y marco el número de Marcel. El cual contesta casi de inmediato.

— ¿[TN]? — es lo primero que escucho cuando contesta.

— Acepto ser la "guía" de los Mikaelson —  digo seria, incluso casi un poco enojada

— ¿Y ese milagro que cambiaste de opinión? — pregunta bastante divertido, lo cual no ayuda a mi humor

— Oye, no dejaré que esos vejetes me expulsen de mi ciudad — digo decidida, lo cual era muy cierto —Tal vez ellos la construyeron, pero nosotros hemos luchado por ella más que nadie.

Puedo ver claramente la sonrisa de Marcel aunque no esté físicamente conmigo.

— Mañana te veo — su tono animado se nota claramente y cuelga.

Suelto un largo suspiro y me empiezo  dirigir a mi departamento.

Debo pensar en lo que me he metido.