Capítulo 8.

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Me sentí muy extraña después de ese sueño. No sé como pude ser tan tonta al pensar que era real.

Cuando sonó la campana de la escuela, todos salieron de clases. Yo estaba sentada cerca del estacionamiento, y Sebástian se aproximaba con una chica que no era Hannah. Debía ser otra de sus conquistas. Ya me parecía hasta gracioso.

- ¡Hey, Letch! - gritó. ¿Necesitas que te lleve a casa?

Me puse nerviosa. Siempre pensé que le avergonzaba estar conmigo, pensé que no quería que nadie supiera que ahora somos hermanastros. El nunca me hizo algún desprecio pero siempre fui invisible. Y ahora que no lo soy, ahora que existo para el, ahora que nota mi presencia; me hace sentir una emoción gigante, un sentimiento casi desconocido para mí. Qué extraño y que increíble.

- Si vas a casa, pues sería genial. Pero si necesitas ir a otro lugar no te preocupes, puedo tomar el tren. - respondí en voz baja, muy apenada

- Sube al auto antes que cambie de parecer - respondió en forma de broma

Como era de esperarse, la chica subió al auto con nosotros. Así que tuve que sentarme en el asiento trasero. Camino a casa, la actitud de Sebástian cambió, parecía que quería aparentar ser otro por esta chica. Noté como se esforzaba para impresionarla. Y subió la velocidad, yo casi no podía detallar las casas que habían a nuestro al rededor. Me puse paranoica y le pedía que bajara la velocidad. Estaba descontrolada, eso solo me hacía pensar en mamá.

Esta fue la razón por la que ella murió, por un irresponsable que conducía como lo está haciendo Sebástian. Todo el accidente de mamá pasó frente a mis ojos. Parece que fue ayer cuando todo ocurrió.

Mamá iba en el asiento del copiloto, papá estaba conduciendo pero decidió detenerse a comprar algunas frutas. Hannah y yo escuchábamos música en el asiento de atrás. Y solo esperábamos que papá regresara para poder irnos a casa, ese día la hermana de mamá iba a visitarnos.

De pronto vimos como un auto se aproximaba hacia nosotros, venía del lado contrario y no era el canal que le correspondía. En fracción de segundos el auto ya estaba sobre nosotros. Yo caí desmayada, minutos después desperté y Hannah estaba a mi lado con los ojos cerrados y la boca entreabierta. Su cara estaba contra el vidrio, así que solo alcance a verla de perfil. De repente escuché los gritos de papá. Los dos asientos delanteros estaban destrozados, y reaccioné: mamá. Fue lo primero que pensé. Me bajé lo más rápido que pude, no sentía dolor, solo quería despertarla. Saber que estaba bien. Apenas me bajé del auto vi en el piso una mano preciosa, con un esmalte rojo en sus uñas. Entre en pánico y comencé a gritar. Era la mano de mamá, en el suelo. Su brazo se había desprendido.

Fui al asiento de mamá y todo estaba lleno de sangre, papá estaba descontrolado, lloraba desesperadamente. Yo estaba en shock. Las personas gritaban y llamaban a emergencias, los autos se detenían a ver la escena de terror. Y de inmediato quise saber de Hannah. Le gritaba fuerte para que despertara, era lo que más le pedía a Dios. Que Hannah reaccionará. La mitad de su cuerpo estaba atorado entre el asiento del conductor y el asiento que ella ocupaba. Despertó de pronto y empezó a gritar desenfrenadamente

- ¡MIS PIERNAS! ¡PAPÁ AYÚDAME NO SIENTO MIS PIERNAS! - lloraba sin consuelo. Yo solo la miraba, tenía un susto terrible. Quería llorar y mis lágrimas no salían, quería gritar o hablarle para que se calmara pero sentía que no tenía voz.

- ¡NO SIENTO MIS PIERNAS POR FAVOR HAGAN ALGO! ¡SÁQUENME DE AQUÍ POR FAVOR! - gritaba Hannah con la voz a quebrantada

- Ya cariño, ya vienen a ayudarte. Papá está aquí, por favor mantén la calma. - decía papá llorando, quería mantenerla tranquila cuando el iba a morir de desespero.

Hannah se volteó a hablarme y de pronto yo no escuchaba nada. Quede anonadada. Tenía una herida debajo de su ojo, la mitad de su rostro estaba lleno de sangre y yo podía ver su piel maltratada. La herida era enorme. Tenia su lindo rostro destrozado. Y no podía escucharla, no prestaba atencion. Solo la miraba. No parecía Hannah. Deseaba que todo esto fuese una pesadilla.

Llegaron dos ambulancias y tres personas que bajaron de ahí, se dirigían hacia mi

- Estoy bien, por favor atiendan a mi hermana. - le dije a uno de los paramédicos.

Se me acercó una mujer tirándome del brazo

- cariño, no estás bien. Tenemos que salvar tu pierna.

De momento no entendí, pero miré hacia bajo y noté como mi pierna estaba ensangrentada. La piel de mi batata me colgaba dejándome el hueso expuesto. Yo nunca sentí ningún tipo de dolor. Me pusieron sobre una especie de camilla. Y así me llevaron hasta la ambulancia.

Yo no quería separarme de Hannah. Estaba loca por tomar su mano y acompañarla hasta el hospital. Sin importar que me volvía loca escucharla llorar. No quería dejarla sola. Yo estaba bien, no sentía dolor. Yo no importaba.

Llegando al centro hospitalario, escuchaba como hablaban de nuestro accidente.

'Dos heridos, y un muerto' 'la madre no logró salvarse' 'No sé cómo quedaron vivos, fue un choque fuerte' 'tenían a un angelito cuidándolas'

'Dos heridos y un muerto' me repetía yo en mi mente. Mamá está muerta.

No podía creerlo, sentía que el mundo se me venía encima. Como hubiese querido ser yo. Mamá no podía dejarnos solos.

Una enfermera pudo avisarme el estado de mi hermana. Se había fracturado la cadera, tenía golpes fuertes en las piernas y una herida grande debajo de su ojo izquierdo.

Hannah pasó por un montón de cirugías, operaciones y tratamientos. Estuvo mucho tiempo en cama sin poder moverse, al igual que yo. Solo que a ella le decían que no era seguro que pudiese volver a caminar. Fue una etapa muy dura para todos.

La muerte de mamá, el no saber si Hannah iba a poder caminar, yo en una cama porque mi pierna seguía lastimada, sin poder ayudar a papá, quien estaba destrozado con todo este desastre.

Nunca supe qué pasó con el conductor. Dicen que iba ebrio, otros dicen que estaba hablando por teléfono, otros comentan que consumía drogas. Solo sé que ahora está preso. Pero eso me tenía sin cuidado, nada de lo que pasara con ese hombre iba a revivir a mamá.

Fueron los peores meses de mi vida. Y Sebástian me los hizo recordar en un segundo.

Espero les guste este capítulo. Disculpen lo extenso, es que quería poner intenso el momento. Y creo que funcionó. Un beso!!! Gracias por leer.

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⏰ Última actualización: Feb 04, 2018 ⏰

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