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Allen

De nuevo nos mudábamos, a mis 17 años de vida y desde que tengo razón cada dos meses o cada tres nos mudábamos, mi madre no entendía que vivir con cada hombre que se acostaba le perjudicaría, estaba enamorada de la idea de poder amar, o engañarse a si misma intentando ser la esposa perfecta ,no entendía él por que de su terques.

.-Emos llegado.-

Anuncio mi madre parando él auto frente a una gran casa gris.

.-Hijo.....-

.-Todo por nuestro bien....ya memorise tu discurso Darla.-

Abrí la puerta decidido a bajar pero su mano me sostuvo.

.-Sigo siendo tu madre.-

Suavice la mirada y Sonreí de lado.

.-Jamas e dicho que no lo seas .....lo tengo muy en claro, tu me diste la vida.-

Sonrió maternal y me soltó para también bajar.

.-Es linda no lo crees.-

Asentí, pues me alegraba que esta casa no fuera tan... Tan pintoresca, aunque mi madre le daría su toque.

.-En un momento llegara él camión de mudanzas así que puedes escoger mientras tu habitación.-

Abrí la puerta despacio, se veía tranquila. Una ves adentro subí por las escaleras hasta él pasillo donde encontré varias puertas, una a una las abrí hasta encontrar una habitación lo suficientemente grande, poco a poco la inspeccione. Un baño dos closet y dentro de uno había una puerta que daba hacia una pequeña habitación extra.

.-Hijo ...¿?.-

Cerré la puerta sin hacer ruido y salí del closet.

.-Quiero este.-

Ella sonrió y se acerco a mi.

.-Te gusto ¿?.-

Asentí sonriendole.

.-Si madre.-

Ella acaricio mi mejilla mas sonriente y luego la beso.

.-Llego él camión.-

Asentí dejando mi mochila en él suelo, bese su frente y bajamos juntos.

Acaso es solo un juego¿?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora