For Life {Yixing&Seulgi}

☆Final☆

Al mediodía del Lunes, Yixing y Seulgi prendieron camino al destino que el hombre tenía planeado. Dentro del auto sonaba una dulce balada perfecta para ese día de invierno; Yixing cantaba en voz baja, mientras, Seulgi mantenía toda su atención en su teléfono. Observaba las fotos y vídeos que sus amigos hicieron la noche anterior en la fiesta. Todos sonreían y reían muy alegres. Fue una buena y divertida noche, como todas las que pasan juntos, hasta que al final todo se volvió una pesadilla.

Después de lo ocurrido entre Suyin y Seulgi, la primera se negaba rotundamente a dirigirle la palabra a su madre. Con la única persona que habló la noche anterior fue con su padre, ante quien lloró a mares y le rogó que no se divorciaran, o que si llegaban a hacerlo, ella quería irse a vivir con él. Claramente a Yixing le alegró el hecho de que su hija lo ame tanto como para querer vivir con él, mas no creyó correcto que lo prefiera a él antes que a Seulgi. Su madre era quien la cuidaba y estaba ahí para ella en todo momento. Yixing, al contrario, pasaba más tiempo fuera de casa que en ella.

Respecto a Yingjie, nunca supieron a donde fue después de enterarse del divorcio. Llegó a la casa alrededor de las dos de la madrugada y fue directo a la cama, sin hablarle a nadie. Era obvio que le afectó negativamente la noticia, y esta mañana, cuando todos se sentaron a conversar sobre el tema, Yingjie no pudo mostrar menos interés en el asunto. Las únicas palabras que dijo fue:

─No me importa quién se quede con la custodia. Pero no pienso irme de Corea.

Y lo entendieron completamente. Corea era su hogar, donde tenía su vida, sus amigos, todo. Aunque, Yixing ni Seulgi habían pensado sobre la custodia, mucho menos sobre qué pasaría después de divorciarse, si venderían la casa y compartirían el dinero, si Yixing se iría a vivir a China. . . . Nada de ello lo habían discutido puesto que Yixing aún se negaba a concederle el divorcio a Seulgi.

Yixing se estacionó en una conocida entrada campestre y no pudo evitar sonreír desde que le llegaron los recuerdos de ese lugar. Miró a la mujer junto a él que dormía profundamente y quiso observarla por un tiempo, debido a lo hermosa y angelical que se veía mientras dormía. Deseó para sus adentros que su plan funcione.

La despertó moviendola suavemente, y no pudo evitar sonreír al ver sus pequeños ojos hinchados y medio cerrados.

─Llegamos ─le avisó.

Ambos bajaron del auto y una fuerte brisa chocó contra sus cuerpos. Yixing se colocó sus guantes de invierno y caminó unos pasos hasta estar frente a la entrada. Seulgi llegó a su lado arreglando la bufanda que llevaba en el cuello, y cuando finalmente alzó la mirada y se dio cuenta del lugar en el que se encontraba, sintió su órgano vital casi detenerse para luego comenzar a latir con rápidez.

─Oh por Dios ─murmuró asombrada.

Yixing sonrió y le señaló el camino. Ella no dudó en comenzar a entrar al lugar en que una vez se celebró el Campamento de Trainees de la SM. Yixing la siguió. Ambos observaban el lugar con asombro debido a que se encontraba bien mantenido, aunque los árboles estaban secos debido al clima. Yixing informó que era muy reclamado para acampar durante todo el año. Y al parecer era cierto ya que vieron a varias personas caminar por los alrededores, o cocinando y comiendo fuera de sus cabañas.

─No puedo creer que siga justo como hace veinte años ─Seulgi comentó con una sonrisa.

─Algunas cosas no cambian ─suspiró Yixing─, o al menos no tanto.

Pasaron por las canchas de deportes, y el momento en que entraron a la de baloncesto, ambos sonrieron.

─Este fue nuestro primer lugar ─comentó Yixing.