Cartas a Taehyung [Vkook || Taekook]

»11. Narrado«

Esa mañana luego de que Jungkook terminara de escribir su novena carta. Llegó muy feliz a su hogar, Taehyung no se encontraba, él estaba trabajando. Jungkook se acostó en el sofá y comenzó a ver la televisión, las puertas de su casa fueron abiertas y su esposo entró por ellas con los ánimos decaídos, había tenido un mal día.

- ¿Cómo te fue hoy en el trabajo, amor? -se acercó a él y lo abrazó

-el mayor sonrió cuando lo vio- fue terrible, Jungkook. Ese jefe es un abusivo, es de lo peor y no lo soporto -habló cansado

-Así que... ¿Fue un día lleno de malas noticias? -preguntó y él asiente- Yo te daré una noticia que puede alegrarte el día

- ¿Enserio? -el mayor arqueó una ceja- ¿Cuál es la noticia?

-Esta mañana, luego de un año de observación fui a la casa de adopción y ¡Dijeron que estamos capacitados para adoptar! -exclama emocionado el menor

- ¡¿Qué?! -parecía estar más enojado que emocionado

- ¡Podremos ser padres, Tae!

- ¿Por qué? ¿Por qué hiciste eso a mis espaldas? -pregunta muy molesto

-Yo solo quería sorprenderte, amor

- ¿Sorprenderme? Somos una pareja, Jungkook ¡No puedes tomar decisiones sin antes consultarme! ¿Qué pasa por tu cabeza? ¡No estoy preparado para tener hijos! ¿Me ves cara de que quiero cuidar niños? ¡Eh, Jungkook! ¡Responde!''

-Tae, yo solo... -interrumpe-

- ¿Tú solo qué, Kook? ¿Qué esperabas? Que en unos días llegue a casa y te encuentre con un niño en brazos y me digas ''es tu hijo''

-Tae, solo quería darte un buena noticia, esto era lo que queríamos, formar una familia

- ¡No estoy preparado, Jungkook! Si tú tan solo me lo hubieras consultado, yo quizá si hubiera aceptado ¡Pero no! ¡Quisiste hacerlo tú solo! Ocultarme todo y hacerlo por tu cuenta

-Si no estabas preparado pudiste decírmelo de otra forma -las lágrimas comenzaron a hacerse presente- no había necesidad de ser tan grosero -su voz comenzaba a entrecortarse

-No quiero verte, Jungkook -dijo el mayor con un tono muy tosco, para gusto del menor

El castaño tomó su sudadera gris y la guardó en la mochila, donde se encontraban todas las cartas, ya que ninguna las ha entregado desde que comenzó a escribirlas.

Con el corazón destrozado en millones de pedazos, Jungkook coloca la mochila en sus hombros y sale de su casa.

Se dirige al parque, en dónde fue su primera cita con Taehyung, saca una hoja y un lapicero, comienza a escribir su décima carta.

Al terminar, contempla un largo rato más el parque y luego decide ir a casa de Hoseok, pues hoy era el aniversario de Yoongi y Jimin, no quería fastidiar, está tan sumido en sus pensamientos que cruza las calles distraído y no nota que un carro se acercaba a gran velocidad y lo atropella.

Taehyung mira la hora en el reloj que está colgado junto a un cuadro donde hay una foto de él y su esposo. Él lo ama demasiado y se odia a sí mismo, por haber sido cruel con él, no había tenido un buen día y el hecho de que Jungkook haya actuado a sus espaldas con un tema que es sumamente importante, lo enfureció mucho.

Han pasado casi 3 horas desde que Jungkook se fue, él estaba esperanzado de que el menor se fuera solo unos minutos y regresara pronto. Lo llamó muchas veces y no contestaba, llamó a casa de sus padres, a casa de Hoseok, e incluso, a casa de Jimin y Yoongi. Todos le dieron la misma respuesta ''Jungkook no se encuentra aquí'' Volvió a llamar una vez más y esta vez si contestaron.

-Jungkook, amor... perdón por lo que dije, estoy muy arrepentido, pero por favor, ven a casa, necesitamos hablar del tema

-Hola -era una voz femenina- usted debe ser la pareja del joven -interrumpe-

-Soy Taehyung ¿Por qué un chica ha contestado el teléfono de mi esposo? ¿Quién es usted?

-Soy Jisoo, he encontrado a su esposo tirado en la pista sangrando hace solo media hora y he intentado llamarlo, pero el teléfono me aparecía ocupado. Está muy grave en el hospital y ningún doctor me dice qué ocurre, pues no tengo parentezco

- ¿En qué hospital se encuentra? Ahora mismo iré para allá -dijo como pudo, pues un nudo se había formado en su garganta

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-No se encuentra nada bien, está en cuidados intensivos, perdió demasiada sangre

-P-pero él... él se pondrá bien ¿Verdad, doctor?

-Aún no sabemos nada, señor Kim. Ni siquiera sabemos si logre despertar.

-No doctor -volvió a llorar más- no me diga eso, por favor, mi esposo no puede morir

-Señor, haremos todo lo posible, pero usted necesita calmarse

-Quiero verlo ¡Necesito verlo! -exigió

-Lo trasladaremos a una habitación y podrá verlo, solo tenga paciencia.

Ya en la habitación Tae entra y corre a abrazar a Jungkook, quién yace en la cama conectado mediante cables a unas máquinas, que lo mantienen con vida.

-Solo traía esa mochila -señala en una esquina- son sus únicas pertenencias

-Gracias -sollozó

Luego de acariciar su cabellera, cogió la mochila y revisó sus pertenencias, estaba la sudadera gris que había tomado antes de irse, había un peluche de un conejito rosado, el cuál se lo había regalado Tae, por su primer mes de novios y también divisó diez cartas, comenzó a leer cada una de ellas.

Al terminar comenzó a llorar aún más ¿Por qué es que nunca le entregó esas cartas? Tae estaba destrozado. Sentía que todo era su culpa, que su esposo no estaría en esa cama de hospital, si él no se hubiera enojado así.

-Todo esto es mi culpa, Kooki -balbuceó- perdóname ¿Sí? Lo siento tanto... yo no quería que esto te pasara. No me dejes por favor, porque no sabría qué hacer sin ti -las lágrimas caían sin cesar.