Hoseok despertó con la luz del día que se colaba por su tienda, se desperezo y peinando sus alborotados cabellos salió de la pequeña tienda.
- Buenos días Hoseok. - Hablo Jofranka. - Jayah se fue al mercado por un poco de alimento. Me pidió que te diera tu tarea de hoy.
- Claro. ¿Cuál es? - hablo alegremente, pues le encantaba ayudar.
- Lavar la ropa. Yoongi te ayudara. - Dijo caminando hacia el bosque. - Yo iré por un poco de leña.
La caravana era pequeña, después de la masacre que enfrentaron en las tierras bajas, había pocos sobrevivientes, que por suerte lograron escapar.
~•~
Tendió la ropa en la cuerda que Wesh el alfa de Jayah, había instalado cerca de la tienda de alimentos, donde almacenaban los granos y carnes que conseguían en el mercado.
Coloco una de las faldas de color amarillo de Madamme Tasarla, y llevo la canasta vacía a la tienda, luego se dirigió a donde Yoongi aun colgaba unas cuantas prendas.
- ¿Terminaste? - Hoseok sonrió. Pero Yoongi no contesto.
- ¿Por qué eres así hyung? - Yoongi le miro y volvió a su tarea. - Intento ser amigos.
- No estoy interesado.
El omega agacho la cabeza, le dolió escuchar esas palabras.
A lo lejos vio cómo su amigo Kavi el hijo de Jayah y Wesh, un alfa potente, venia casi corriendo con libros en su mano.
- ¡Kavi! ¿Trajiste algo interesante? - el nombrado asintió con la cabeza, y le entrego los libros que llevaba bajo el brazo.
Kavi era dos años mayor que él, pero tenia espíritu joven. Como el de un niño.
- Para que estudies. - dijo sonriendo. - Compártelos con Yoongi.
Hoseok sonrió con pesar, y asintió. Viendo como Kavi se dirigía a Wesh y le reportaba todo lo visto.
Fue hasta su tienda observando todo, eran tres libros, con títulos de "Guerra y paz" "Hamlet" y "Cosmos".
Se sentó sobre la improvisada cama de paja cubierta por una frazada de lana, y comenzó a leer el primero.
~•~
Cuando llegó la noche, Hoseok ya había leído todo el libro de "Cosmos", salió de la tienda y observo el cielo estrellado.
Quería colocar en práctica lo que había aprendido en el libro. Comenzó a buscar las constelaciones, y fue ahí que sus pies le llevaron, como si fuerzas mayores le obligaran a caminar.
Comenzaba a entrar en la profundidad del bosque, alejándose del campamento.
Por alguna razón sentía que algo le llamaba, haciéndole dirigirse hacia ese claro en que él se encontraba, observando todo. Como esperando algo.
O alguien.
Porque entonces sintió como cayó sobre él, lo que sería una persona, que lo tenía acorralado contra el cesped.
El omega abrió los ojos, no podía creerlo, piel pálida, cabellos plateados, ojos grises, y el detalle más importante; unos colmillos se asomaban amenazando con perforar su piel.
Hoseok nunca creyó en vampiros. Creía en todas las criaturas menos en esa.
Se preguntó porque jamás coloco atención a las ancianas de su manada cuando advertían sobre criaturas como esas.
El enemigo natural de los lobos, según las leyendas.
- ¿Que hace un lindo omega solo caminando por el bosque? No importa, igual serás mi cena.
- ¡Por favor! No me hagas daño, aún no he realizado mi sueño.
El vampiro se sorprendió. ¿Sueño? ¿Él tenía sueños?
- ¿No tiene sueños señor vampiro?
- No.
El pálido se acercó más a la yugular externa del omega, pensando en drenarlo por completo. Porque se veía muy apetitoso.
Hoseok cerró los ojos, murmuraba miles de ruegos pidiendo piedad, lleno de pánico rezaba a la luna, pero en vez de sentir los colmillos, sintió como la nariz de su atacante le rozaba el cuello; le estaba olfateando, como lo haría cualquier alfa, como si fuese de su misma especie.
El vampiro suspiró, ese aroma era encantador. Su sangre olía delicioso.
- Bien, te llevare conmigo pequeño omega. -Dictó sonriendo ampliamente.
Capitulo corto porque ando en exámenes y tengo que estudiar mucho 😣
