Invierno

No son osos.

No me podía seguir negando como con el simple echo de pensar en el todo en mi se hacía gelatina, como al pronunciar su nombre mi boca sentía un cosquilleo.

Será fácil acercarme a el, ya que además de que era amigable, la conexión que nos unía lo hacía todo más fácil.

Sabía dónde estaría, en la push, cada vez que me acercaba a la playa algo en mi corazón revoloteaba y mi sonrisa no salía de mi rostro, estúpido amor.
Trate que pareciera como si fuera un día normal y que sólo daba la vuelta, camine despreocupada y me senté cerca del mar.
Busque a Seth con la mirada no lo encontré pero sabía que estaba ahí, poco a poco sentí como el escalofrío recorrió mi cuerpo, gire mi cabeza y efectivamente tenía a Seth enfrente mío.

Solo que...bueno...

Seth no llevaba camisa, y me dio una sonrisa como si no me hubiera visto en tanto tiempo.
ay no, ¿Por qué eres así?.

-¡_____!, ¿Cierto?.
-si soy yo, que casualidad encontrarte aquí.
-lose, de hecho yo estaba casi al otro extremo de la playa, pero.

Fruncio en entrecejo y en su rostro se notaba la duda.

-algo extraño me jalo hacia aquí.
Me miró fijamente a los ojos, por un momento me sentí intimidada.
Sentí como mi corazón revoloteo, estaba alterado como si hubiera corrido kilómetros, este chico y yo teníamos que estar juntos.
Paso el rato, hablamos sin ninguna preocupación, pero comenzaba a anochecer.

-¿Qué hora es?, Maldición espero no sea tarde si no ya no me dejaran venir.

-no te preocupes, puedo llevarte.

Ambos nos levantamos, el entro al copiloto, para mí mala suerte se puso un suéter, tan buena que estaba la vista, madre mía.

Durante el camino seguíamos hablando y riendo, nos entendíamos tan bien, creo que al fin y al cabo la imprimación no era tan mala.

-Por cierto, ¿Tú sabes que tan cierto es el rumor que pasa?
-No, ¿De que trata?.
Frunci mi ceño.
-Últimamente han estado ocurriendo asesinatos sin explicación, y también desapariciones, y se dice en el pueblo que hay un oso en el bosque gigante y de color negro azabache

Mi estómago se encogió un poco.
Tiempo atrás, Sam había sido visto, pero los asesinatos y desapariciones los habían echo dos chupasangre, estos no eran como los Cullen, estos eran un riesgo para el pueblo, teníamos que acabar con ellos.

-¿En serio?, No me había enterado hasta ahora.
-Mañana iré a los bosques con unos amigos, queremos buscarlo.

Pise el freno en un arranque de pánico.

-¿Qué?.
-será divertido, ¿no crees?
-¿Realmente crees en esas historias?, Digo al fin y al cabo siempre se busca la excusa para llamar la atención.
-Será divertido, vamos no te preocupes tanto, te pareces a mí hermana.
Se rió.