Invierno

Epílogo

Años después:

La brisa era tibia, el olor a mar inundó mi nariz y con gusto lo inhale, la arena debajo de mis pies era fría, Seth salió del mar limpiándose el exceso de agua de su cara, al verme me sonrió y trato de caminar rápido para encontrarse con migo.

Seth dió un gran estirón, casi éramos de la altura, su cuerpo se había tonificado y su espalda se había echó más ancha, la piernas bien torneadas de Seth llegaron a la orilla y susurró un hola para después besarme.

Sus manos fueron hasta mi abultado vientre, trate de abrazarlo pero me alejo.

-Estoy mojado.

Sus labios se curbaron en una hermosa sonrisa y, sin importarme, lo acerque a mi cuerpo.

-Sabia que te encontraría aquí

-No crei que me dejaran salir del laboratorio tan pronto, lo malo es que no pude estar con tigo en el ultrasonido.

Seth se inco y acarició con mucho cuidado mi barriga, después de tanto tiempo habíamos logrado tener nuestro pequeño milagro, el bebé dentro de mi pateó al sentir la energía de su padre, Seth comenzó a hablarle y este se emocionó.

-¿Y bien?, ¿Como salió todo?.

Subió su rostro hasta conectar con mi mirada para después bajarlo y besar mi barriga.

-¿Como se encuentra nuestro bebé?

-Nuestros bebés

Seth paro de acariciarme y muy lentamente subió su rostro de nuevo hacia mí, estaba muy sorprendido.
De mi bolso saqué la imagen de la radiografía y la puse delante de él, en esta se podía notar como los bebés estaban acomodados de tal manera que los dos se veían, ambos mirando a los pies del otro y lo más tierno es que estaban agarrados de las manitas.

-Oh y también pasé a Home Depot y no sabía si elegir el color morado o el rosa para su cuarto.

De mi bolso también saqué la muestras de pintura en diferentes papeles

-Siento que el rosa es muy cliché, ¿Tu qué dices?

Al bajar la mirada Seth tenía los ojos abiertos al igual que su boca y respiraba entrecortado.
Poco a poco se levantó, tomo mi rostro y unió nuestras frentes.

-Dos bebés, gemelas, niñas.

Sonreí y dejé que las lágrimas que tanto guardaba salieran de mi, Seth comenzó a llorar junto con migo.
Me beso y ambos comenzamos a reír.
Después Seth se alejó de mi y comenzó a gritar de la emoción y a brincar por todos lados.

Limpie mis lágrimas y una vez más Seth se acercó a mí con una gran sonrisa.

-¿Como es que me haces el hombre más feliz a cada día?

Alce mis hombros y reí junto con el.

-te amo tanto

Volvió a sollozar

-y yo a ti.

Y de nuevo un beso se hizo presente.

-Vamos a casa, tenemos que avisarle a todo mundo.

Le dije, Seth sin pensarlo más tomo sus cosas de la arena y me tomo de la mano para dirigirnos a casa.

-¿Como crees que reaccionara Leah?

Le pregunté a Seth mientras apretaba su mano

-Bueno, yo digo que el pequeño Joe tendrá que aguantar jugar con Barbies.

Seth soltó mi mano para pasar su brazo por mis hombros.

-Sabes, después de todo, me alegro habarte encontrado, soy tan feliz con tigo y superamos mucho durante tantos años.

-No olvides los que faltan cariño

Y así Seth paso su otro brazo por debajo de mis muslos y me llevo cargando cual novia.

-No dejaré que camines, los tobillos se te pueden inchar y mis chicas te van a cansar.

-oh ¿Ahora ya son tus chicas?, Todavía no nacen y ¿ya las reclamas como tuyas?, Oh no hermano, estas dos niñas son mías

-siempre podemos compartir

Seth río al igual que yo y así, entre los brazos de Seth una vez más me sentí segura.

"Nada en la vida es coincidencia"

Fin.

Doy por terminada la historia de Invierno, de nuevo muchas gracias a todas las personas que están y estuvieron leyendo, gracias por acompañarme en este largo viaje de palabras, publicaré más fanfics que ya tengo escritos así que esperenlos.
Sin más que agregar gracias, no leemos.
Con amor
Alex❤