"tal vez el invierno no es tan malo como parece"
Seth Clearwater y tú.
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Una historia que muchas personas me han pedido y aquí está.
La historia es completamente mía pero los personajes...
Sentí un dolor punzante justo debajo de mis costillas, el aire salió de mi un poco pero pude darle un buen golpe a la quijada de la chica con la que peleaba.
Siempre ganaba las peleas ya que con un solo golpe que me dieras, te dolería a ti ya mi solo me haría cosquillas.
Cerca del puerto de Port Angeles había una bodega en la cual se hacían peleas clandestinas, las peleas de mujeres eran las que más llamaban la atención y sobre todo por las que más apuestas hacían, al parecer para algunos marinos y motociclistas era exitante ver a dos chicas peleándose, jamás entenderé a los hombres.
La morena cayó al piso, sangraba por la boca, tal vez se había mordido la lengua, tome un poco de aire y escuché a mi alrededor los gritos, alardeos, obscenidades y abucheos por parte del público.
Me abri paso entre la gente y fui a refrescarme, hace un tiempo que vivo sola, mis padres viven en Forks pero me fui a vivir sola, me llevo bien con ellos pero decidí ganar dinero por mi propia cuenta para la universidad y bueno esto es lo que hago.
Moje mi cara y me peine para atrás, la puerta se abrió dejándome ver a Leah parada en el marco.
-peleaste bien. Traia una toalla en su hombro derecho,me la entrego. -gracias, creía que estarías con tu hermano. -llego hace mucho tiempo, ¿Qué clase de amiga sería si no te veo pelear?. -bueno eso es cierto, ¿cómo está tu hermanito?, ¿los fríos vientos de forks le van bien?
El hermano de Leah tenía una beca en florida y decidió transferirse a forks, yo no lo haría, haría lo que fuera por salir de este pueblo, pero mi relación con la manada me lo impide, la única forma de irme es imprimandome, pero me da demasiado miedo.
-no le molesta, esta acostumbrado a la playa y lo primero que hizo fue regresar a la Push. -antes de que yo fuera tu ya sabes que, no podía soportar el agua helada, no sé cómo le puede gustar. -¿Que tal si comienza a tener síntomas?, Así comencé yo. -así comenzamos todos.
Vi la preocupación en la cara de mi amiga, no tenía hermanos pero ella es como uno para mí y no quería verla así.
-hey- la tome de los brazos con dulzura- ¿Qué tal si mañana nos lanzamos del risco?- Leah hizo una mueca, no estaba para nada convencida- vamos, es algo tuyo y mío que ambas disfrutamos, por los viejos tiempos ¿si?.
Saque mi labio inferior y hice la mirada más tierna que tenía. Leah río por lo bajo.
-bien, te veré mañana en la push.
Sonreí y di pequeños brincos.
-bien, iré por mi dinero de las apuestas y te invito una cerveza.
~
Los días soleados son poco frecuentes en forks, adoro el sol, lastima que no puedo ver mucho de la primavera o del verano aquí en Forks. Con melancolía mire la playa y hundí mis pies descalzos en la arena, Leah lleva veinte minutos de atraso, no me gusta que me dejen esperando.
Un balón de voleibol cayó muy cerca de mi, lo miré y después alce la mirada.
Un chico venía corriendo hasta mi, algo en mi interior se revolvió, mientras corría su collar iba de arriba a abajo, sentí sudor frío y un zoológico en mi interior.
"Ay dios,no, no, no, no, ¡no ahora por favor!"
Tome el balón y me levanté con cuidado de no marearme más de lo que estaba.
-Hola, lo lamento, ¿El balón te hizo daño?.
Pregunto preocupado.
Dios, su voz.
-n-no, no.
Carraspe y extendí mis brazos para darle el balón. Sonreí nerviosa.
-Soy Seth -______
El chico también parecía nervioso.
-¿Quieres unirte?, Al juego al voleibol. -me encantaría pero estoy esperando a una amiga así que será después.
El chico volvió a sonreír y esta vez rasco su nuca un poco.
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Su mirada estaba justo en mis ojos, sentía que podría ver a través de mi. El sol no ayudo en nada ya que hizo resaltar sus lindas facciones.
Sentí como algo me pego muy fuerte en el estómago y me dejó sin aire, estába pasmada, sentí un repentino choque eléctrico por todo mi cuerpo.
Me había imprimado en este chico que apenas conozco.
El chico quito su vista de mi y fue hasta dar con algo o alguien detrás mío. Sonrió y pude notar con más atención unos pequeños oyuelos en sus mejillas.
-¡Leah!. Grito con emoción.
Rápidamente me gire y note a mi amiga caminar hasta mi cubriendo sus ojos con unas gafas de sol y un camisón tejido junto a unos shorts.
El chico se lanzó a sus brazos y ella lo abrazo, tuve por unos momentos una corazonada, espero estar equivocada.
-Entonces ya se conocen Sonrió Leah para mí. -¿Qué? -________ el es Seth mi hermanito.
Todos mis miedos se hicieron realidad.
Me había imprimado en el hermano menor de mi mejor amiga.