Call Me Bad Son || KaiSoo

VI. The Less I Know

/Te juro que cuanto más te conozco, menos sé de ti/.

Kim JongIn

Por supuesto que quería follarse a Do KyungSoo, tampoco era ciego  a las verdaderas  intenciones  del otro que cada vez se hacían  más provocativas después  de ese matrimonio;  pero de ninguna manera lo haría hasta no estar completamente seguro que ese mocoso no era su hijo. Con esa resolución se había mantenido fuera de cualquier acto que terminara follándose al menor durante esa tortuosa semana. Por suerte, su penosa incertidumbre estaba por terminar; mientras se encontraba en la sala de espera de una clínica, en la que ese viernes en la mañana, finalmente recibiría las pruebas de ADN que había solicitado al inicio de esa semana.

Una enfermera le hizo entrega de dos exámenes, antes de marcharse le indicó que ante cualquier duda, se acercara a preguntar. Nuevamente se sentó esta vez mas ansioso que nunca, respiró profundo un par de veces antes de abrir el primer sobre, en cierto modo esperaba que ese muchacho no fuera su hijo pero por otro lado, deseaba que sí, de ese modo no se sentiría del todo engañado.

Leyó la primera parte, pero decidió  saltar  directamente al final,  en la que revelaba  los resultados,  en ese momento contuvo la respiración mientras releía los resultados, y como lo sospechó... Do KyungSoo no era su hijo; exhaló el aire que había  retenido;  de todas las emociones que sentía, la predominante era su ya creciente excitación, deseaba salir inmediatamente hacia su casa y agazaparse con el menor —se maldijo así mismo por estar pensando con su otra cabeza—.

Una vez que se tranquilizó y que las imágenes de KyungSoo sudoroso con sus labios cerezos gimiendo su nombre, se desvanecieron  al menos por el momento; decidió comprobar la segunda prueba de paternidad... un instante después, no había forma de expresar lo que le produjo al leer aquellos resultados, con su vista empañada en lágrimas que corrían libremente por sus mejillas, lloró de impotencia, de tristeza, de enojo, todas aquellas emociones que convergían en su interior al descubrir que en verdad tenía un hijo, al que había abandonado todos estos años.

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Sus ojos estaban rojizos e inflamados cuando se observó en el espejo del baño de la clínica, lucía incluso pálido, sentía cómo si tuviera más años, que sus apenas 34; lavó su cara y respiró profundo para tranquilizarse antes de salir muy decidido de ese lugar, tenía que hacer un par de visitas antes que acabara ese día.

Mientras conducía alejándose de la congestionada ciudad, hacia la casa campestre de Kim JunMyeon, su padre; sus pensamientos volaron hacia ese lunes —el día después del matrimonio de su secretaria—.

♥️♠️♦️♣️

Entró a su oficina, sorprendiéndose al encontrar a su amigo quien lo esperaba con su rostro serio, sin el rastro de humor que siempre lo caracterizaba; le manifestó sin ninguna vacilación que Do KyungSoo, era en realidad un "famosillo" jugador de póker, conocido en ese mundo como Dyo. Apenas si tuvo tiempo de procesar aquel dato, cuando Taemin le reveló amargamente que hace aproximadamente cinco años atrás, ese niñito —como se había referido— lo había robado en el Texas hold'em, cuando al final habían quedado los dos en ese juego, juego que tenía asegurado, pero al terminar "el niñito ese" se había quedado con su pequeña fortuna, mientras le sonreía cínicamente, y por cosas del destino —destino: arte de indagar por ahí—Taemin se había dado cuenta que el mocoso era menor de edad, así que como buen ciudadano, alertó a los dueños del lugar; al final KyungSoo se había salido con la suya, al mostrar una identificación obviamente falsa, haciéndolo quedar como un mentiroso, por lo que los socios de ese negocio optaron por expulsarlo mientras que ese niño se quedada con las ganancias de esa apuesta que debían ser para él. ¡Es un vil estafador y ahora viene por ti! Había concluido su amigo. Quién  no  sabía de qué  manera  el chico  se había  interesado  en su amigo  para estafarlo.