III. Advertencias inútiles.

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Luego de 3 semanas Elizabeth apareció en el instituto. Me acuerdo que ella se acercó a mi con una mirada muy seria, pero no con odio, en sus ojos vi preocupación... Algo que nuevamente ignoré por completo.

-¡No sabes lo que estas haciendo!
Me dijo con voz firme y clara

-Si te refieres a lo que creo que es, no tienes por que entrometerte. Yo quiero demasiado a Giuzzeti y el a mi también.

-El es una mala persona Emily, no sabes lo que haces! Le termine porque su mejor amigo me dijo que es matón, el mismo me enseño las cicatrices que tiene en el estomago por apuñaladas. Alejate de el, te lo ruego.

-El dijo que actuarías así, esperaba algo mucho más maduro de tu parte ¡Te odio! Dejame ser feliz y alejate de mi, de una maldita vez.

-Esta bien, lo intenté, luego no digas que no te lo advertí. Te dejare "ser feliz".

Aun no puedo creer que la haya tratado de esa forma tan cruel, ella solo se estaba preocupando por mi. Pero no le hice caso, no me importaron sus advertencias. ¡Que tonta fui! Si tan solo le hubiera hecho caso, nada hubiera pasado... pero falta poco para que les explique todo.

Si el río suena, chismes trae. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora