Criminal El final

1.7K 120 2
                                    

Nunca me había sentido tan triste de haber cazado a alguien, ni siquers cuando debía cazar a personas inocentes. Este era mi último caso junto a los agentes, junto a Spencer. No estaba enamorada de él, eso era seguro, nos conocíamos muy poco para estarlo. Pero sí sentía algo por él, tal vez era la añoranza de una vida normal, o que él me trataba tan bien que me sentía feliz. Pero desgraciadamente no podía hacer nada para quedarme, si osaba a infringir nuestras tradiciones, todos mis cercanos morirían y yo también.

Salgo de la casa donde encontramos al criminal, veo de lejos a Spencer y algo en mí hace que vaya corriendo hacia él y lo abrace con todas mis fuerzas. Él me corresponde el abrazo.

- ¿Por qué tan feliz?

-Porque atrapamos a todos loa criminales - mentira, no estaba feliz, sólo quería abrazarlo una vez más, sentir su olor unos minutos más.

-Sí, tú lo hiciste - me soltó lentamente y me miró a los ojos.

- Mira, lo de esta mañana - necesitaba pedir perdón - no me arrepiento de nada, todo lo hice con el corazón. Sólo que estoy asustada. Pero no quiero más.

- ¿Te quedarás? - preguntó emocionado.

- No por ahora, debo encontrar 5 criminales más.

- ¿De qué hablas?

- Ustedes no atraparon a todos de la mafia en mi familia. Quedaron 5, son inexpertos, así que será fácil encontrarlos. Y cuando todos estén en la cárcel o muertos, voy a volver. Veremos qué pasa entre nosotros, yo comenzaré de 0, cambiaré mi nombre, seré alguien nuevo y te amaré, como en las películas que veía cuando pequeña, quiero eso, amar a alguien... - Se escucha un disparo, pero yo no me muevo de mi lugar, me quedo estática mirando a Spencer a los ojos, se escucha un segundi disparo y siento algo en mi estómago, lo toco y veo sangre. Me caigo al piso y Spencer trata de tapar la herida mientras pide ayuda.
Al parecer, ellos me encontraron antes.


**********************

Camino lentamente, oliendo cada cosa del lugar, la tierra mojada, la lluvia, l café que vende el carrito.
Hoy soy otra persona, hoy ya no soy Grace, soy Madelyn.
Veo a un hombre sentado en una banca, está leyendo rápidamente un libro, le toco el hombro y él se da vuelta. Al principio no me reconoce, yo he tenido que cambiar, ya no soy rubia, soy pelirroja, llevo maquillaje y ropa diferente.
El se para y me abraza fuertemente.
Sin soltarlo le digo:

- Te dije que volvería, ya podemos intentarlo. Podemos intentar ser felices porque nadie lo va a impedir.

Imagina con Spencer ReidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora