Confusión - (en edición)

capitulo 5

"Definitivamente Potter es un reverendo idiota" pensó Draco, pero como se le ocurría dejar caer semejante boba a un desconocido, era cierto que lo había presionado, pero mientras lo hacia no creyó que realmente Potter diría algo así.

Tal vez alguna queja, o una excusa, o que solo se sentía atraído físicamente, un impulso adolecente cualquiera.

Ahora aunque quiera decirse a sí mismo que aquellas palabras no eran más que una broma no podía, Potter lo había dicho con tal seriedad y dolor que no cabía duda que había sido completamente honesto.

Las manos de Potter se enredaron en su cabello, el moreno lo insto a abrir la boca para poder devorarlo, y vaya que lo hizo, la ardiente lengua que ingreso a su boca no le daba tregua, lamio cada recoveco y los dientes mordieron con firmeza sus labios. Potter bajo sus manos para acariciar sus hombros descendió con suavidad por los brazos para finalmente posar las manos en su cintura, de aferro de sus caderas con fuerza para pegarlo más a su cuerpo.

Entonces comenzó a tener un ataque de pánico, Blaise había tenido razón, probar para luego no perderlo por completo... seria doloroso. En ese momento ya se sentía un poco devastado.

Pensar que en cuanto aquella calentura acabara Potter lo dejaría de lado...

Forcejeo un poco para alejarse de aquel beso arrollador.

- Debo irme – jadeo, le faltaba el aliento.

- No – fue la respuesta de Potter para luego volver a tirar de el para tomar sus labios.

Quería apartarse, pero las sensaciones que le provocaba eran tan placenteras y deliciosas, su fuerza de voluntad flaqueaba, pero finalmente volvió a separarse.

- Es... es tarde, debo encontrar a Blaise –

Harry los hizo girar sobre la hierba aprisionándolo contra el pasto seco

- No – la rabia en su voz era inconfundible – no con él – los ojos de Potter refulgían con enojo – con migo.

- ¿Y qué me darás tú? – se le salió

El Gryffindor flaqueo en su determinación y eso fue todo lo que Draco necesito para recuperar la compostura.

- Nada – le aclaro – no soy alguien fácil que se conformara son sobras.

La mente de Harry funcionaba a mil por hora, aquellas palabras sonaban a propuesta, a pesar de que Malfoy le estaba diciendo que no habría nada entre ellos a la vez le decía que sí, que podría haber algo si él lo tomaba con seriedad, si le ofrecía todo.

Dudaba, realmente no conocía a Malfoy, no negaría que físicamente se sentía más que atraído por él, pero emocionalmente... como seria aquello, ¿pelearían como siempre lo habían hecho?, ¿Malfoy seguiría siendo un idiota sin remedio, creído y sintiéndose la última coca cola del desierto?. Como sería realmente.

Se quedaron en ese silencio por un par de minutos cuando Harry sintió que Malfoy tiraba de él, un nuevo beso comenzó entre ellos y Harry no podía decir quien tenía el control, solo sabía que ambos se deseaban tanto que hasta dolía, el beso que Malfoy le estaba dando estaba cargado de tantos sentimientos no dicho y a la vez entrañables, pero tras unos cuantos minutos Malfoy lo hizo girar en el suelo; se alejó del beso y se puso de pie.

- Cuando sepas lo que realmente quieres... vuelve – tras esas palabras el rubio se fue.

Por un momento Harry pensó en detenerlo, pero que pasaría si lo hacía, su mente estaba demasiado confusa. Y en cuanto se distrajo un momento el rubio ya había desaparecido, posiblemente volviendo a su forma de animago.