23. Amigo de la infancia

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Bills junto con Brissa y Wendy llegaban a Santa Rosa. A Bills le traía tantos recuerdos, con sus padre y su hermano, antes que pasará aquel accidente.

Pablo: Bills, ¿eres tu?

Voltea a ver --- Pablo --- se acerca y lo abraza --- mi viejo amigo.

Pablo: mira como haz crecido, no has cambiado mucho.

B: ni tu.

Ambos se ríen, Brissa y Wendy los miran. Por petición del amigo de Bills, fueron a su casa.

Pablo: pasen, adelante están en su casa.

--- Gracias --- contestaban los tres.

Pablo: bien pequeños, mi nana se va ocupar de ustedes.

B: anden vayan.

Nana: vengan por aquí.

Pablo: por favor dales leche y galletas.

Nana: por supuesto señor, con gusto. Vengan niños.

Bills y su amigo se sentaban en las sillas del jardín.

Pablo: dime, ¿como te ha ido?

B: pues más o menos. Pablo necesito tu ayuda.

Pablo: claro Bills, lo que necesites cuenta conmigo.

B: mira te contaré....

Bills le explicaba la situación que pasaba, mencionaba que tenían que ir a Ciudad Rosa donde se encontraba el tío de la pequeña Brissa. Pablo pensaba en algo para ayudarlos a llegar a esa ciudad.

Pablo: vaya que si es complicado, pronto se darán cuenta que son las pequeñas a las que buscan.

B: si llegamos con el tío de Brissa, podremos detener a esa señora y sus maltratos.

Pablo: no se porque tanta crueldad tienen algunas personas, siempre con los niños se desquitan. Bills déjame ver algunos de mis amigos, quizás ellos te puedan ayudar. Ahora quiero que sean mis invitados y se queden aquí a pasar la noche.

B: no Pablo, no quedemos ser molestia. Iremos a otro lugar.

Pablo: insisto, me ayudaste mucho cuando eramos niños, ahora déjame ayudarte.

B: esta bien, nos quedamos.

Salían Brissa y Wendy al patio, se ponían a jugar, Bills jugaba con ellas, se divertían mucho, Pablo miraba, se unía a su juego. Al caer la noche, las pequeñas se quedaban dormidas en un cuarto, mientras Pablo y Bills platicaban.

Pablo: te ves bien.

B: uhm, ¿a que te refieres?

Pablo: cuando jugabas con esas pequeñas, parecías su padre y ellas tus hijas, se veían como una familia, solo falta tu esposa y ......--- volteo a ver a Bills, este estaba triste y con sus orejas hacía los lados --- pero, ¿que te pasa?

B: amigo, si tengo un hijo y una pareja, solo que no se en donde están. Por desgracia tuve un accidente, jamás los volví a ver, solo se que mi novio tuvo un hijo, nuestro hijo. Quizás crean que los abandoné ......y ahora lucho por encontrar......--- caía una lagrima de su ojo.

Pablo: perdón, no lo sabía. Se que algún día los vas a encontrar y serán felices --- ponía su mano en su hombro --- animó Bills --- este muestra una sonrisa --- dime, cuando dejes a Brissa con su tío, ¿que va pasar con Wendy?

B: lo he estado pensando, ella es muy buena niña, tal vez la adopte y sea mi hija, sabes las quiero mucho a ambas, a pesar del poco tiempo que estoy con ellas. Creo que tendré que negociar con el tío para que me permita ver a Brissa.

Lazos del alma y del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora