El Diablo En Busca De Su Reina.

Encuentro

No importa cuanto tiempo pase aquí no me acostumbro del calor infernal de este lugar.

Pero eso no es lo peor sino que estar sentado en este trono por tanto tiempo es incomodo.

Pero tengo temas más importantes como buscarla.

He podido conectar con ella a través de sueños pero nunca le puedo ver el rostro y es increíblemente irritante.

-Mi señor.

-¿Que?

-Mi señor las brujas la han  encontrado.

-Llevarme con ella.

Necesitó ver como es ella.

¿Sera rubia o morocha, será alta o será vaga, tendrá pelo negro o marrón?

¿Tendrá tatuajes, estará con alguien?

Solo pensar que ella pueda estar con me hace querer matarlo.

¿Tendrá un carácter fuerte o será tímida, será tierna o salvaje?

Quiero saber todo de ella.

Cuando me quise dar cuenta ya estaba en frente de las brujas.

Tenían una enorme nariz con muchas verrugas y le faltaba uno que otro diente.

-Quiero verla

Ella hace un asentimiento, mientras que tira algunas cosas al caldero.

Poco a poco aparece una imagen de una chica de pelo púrpura con unos hermosos ojos verde marina.

Ella era hermosa tenía una hermosa piel blanca.

Pero parecía enojada, ella tenía las cejas juntas y expresión de enfado.

Parece que discute con un chico.

-Quiero oír lo que dicen.

La bruja tira un liquido verde.

-Te he dicho que no.

Podía escuchar como ella hablaba.

-Y yo te e dicho que si y es mi última palabra.

-Quien mierda te crees para venir y decirme que a ser.

-Tengo todo el derecho yo soy tu novio y me debes obedecer.

El se acercó amenazante mente hacia ella, ¿quien mierda se cree ese para hablaba a mi reina?

-Mira tarado si pensas que por ser mi novio me podes mandar estas muy equivocado y por cierto terminamos.

Ella se dio la vuelta para irse pero el le agarra la mano fuerte.

Pero la imagen desaparece.

Que demonios paso.

-Lo siento mi señor pero se a acabado el tiempo.

-No me importa quiero verla de nuevo ahora.

-Lo siento no puedo hacerlo.

Ella estaba asustada y con razón tengo una reputación muy mala.

- No me importa.

-No puedo mi señor solo me queda magia para enviarlo hacia el mundo humano.

-Pues mandarme ahora.

Mientras tanto con nuestra chica:

-Suelta.

Pero el no lo hacía.

El ponía mucha fuerza en su agarre.

-No me podes dejar.

El estaba furioso, cada vez ponía más presión en su agarre.

Mierda iba a quedar marca.

-Suéltame me lastimas.

Pero no lo hacía

Me dolía horrible la muñeca.

-La señorita a dicho que la sueltes.

Giro mi cabeza hacia atrás no puedo creer lo que veía.

Chico alto y musculoso podía ver que estaba todo tatuado y tenía un piercing en su nariz.

Era muy lindo, pero tenía una mirada fría.

-No te mentas en lo que no te incumbe.

-Pues me incumbe ya que tu estas tocando a mi reina.

¿Espera que? ¿ reina?

El se acercó así mi y me agarra.

El pone una mano tapándose los ojos.

No veo nada.

De repente puedo escuchar un grito de parte de mi ex.

-No por favor no me hagas nada.

Puedo sentir como él me suelta la muñeca.

Cuando el saca la mano de mis ojos puedo ver como mi ex sale corriendo.

-¿Qué le hiciste?

-Lo que se merecía.

-¿Quien eres?

- Pues me conocen con muchos nombre, soy el diablo o Lucifer como tu prefieras.

-Espera me estás diciendo que tu eres el diablo, el que tiene cuernos y cola.

-Exacto.

-En serio de que hospital ¿mental saliste?

Por favor que va a ser el diablo, si él es el diablo yo soy una hada y puedo asegurar que no lo soy.

-Pues realmente no tengo cuernos ni cola y no e salido de ningún hospital mental.

- Digamos que te creo, que hace el diablo ayudando a una chica que ni siquiera conoces.

-Tu no eres cualquier chica.

-Y que me hace diferente.

-Que tu eres mi reina.