Imaginario

XII

Yo:¡Actualizare mañana!

Imaginación: JAJAJA! CLARO QUE SI COMPAÑERA!

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Al ver el dibujo le había entrado un miedo atroz. ¿Como rayos estaba un dibujo donde estaba su niño en una caja de tiempo? ¿Que diablos pasaba aquí? ¿Que significan los garabatos? ¿Que tenia que ver Manneter en todo esto? Miles y miles de preguntas se formulaban en su cabeza sin ninguna respuesta, y el miedo aun estaba presente en su sistema. Sinceramente, Elder Kettle ya no sabia que hacer ni a quien recurrir

Poco a poco perdía la esperanza de que esta locura se termine de una buena vez

¿Por que su niño? ¿Por que Mugman? ¿Por que él?....

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Una vez Manneter terminara de discutir con su madre, este jalo levemente el brazo de Mugman para guiarlo a su habitación y esperar a que llegue su hermano mayor y su padre

Y, como Mugman suponía, era el mismo cuarto que él tuvo en esa casa

-Es... muy bonito -Comento Mugman, tratando de evitar, sin éxito, la sorpresa de lo muy parecido que era el cuarto del joven de morado con el suyo, o al menos, se parecía antes de mudarse-

Sinceramente Mugman no entendía lo que pasaba. ¿Quienes eran esta gente? ¿Por que Cuphead estaba en esa dibujo? ¿Estaba en una especie de trance o algo así? ¿Cuphead tenia hermanos?

Como quería que su abuelo estuviera ahí con él...

-Oye, ¿te gusta dibujar? ¡A mi me encanta! ¡Quiero ser un gran artista de grande! -Dijo felizmente Manneter, sacando de un baúl hojas blancas, pinceles y acuarelas. Entrego varias hojas al azulino, al igual que un pincel-

-A mi también me gusta dibujar, pero no lo había pensado bien como profección

-¡Si lo eliges podemos ser compañeros de trabajo! -Dijo un emocionado y muy feliz Manneter. Mugman tan solo rió, respondiendo un simple "Tal vez"-

Fue así como ambos niños se pusieron a dibujar lo que sea que su mente creara y su mano dictara

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Sally y Cala Maria seguían contando y disculpándose con un Mugman dormido. Se les partía el corazón al ver al menor en esas condiciones, después de todo, le habían agarrado un cariño y amor grandisimo

Sentían que eran las hermanas mayores de Mugman y por ende, se sentían muy culpables de lo que le paso al azulino

Pero ambas vieron la pequeña sonrisa de Mugman aparecer en su rostro, aunque estuviera dormido. Las calmo un poco aquella sonrisa, pensando en que el pequeño se sentía bien y que de seguro soñaba algo bonito, algo que lo hubiera hecho sonreír de esa manera

-Recuperate pronto, Mugman... -Susurro Cala Maria, agarrando delicadamente la mano de Mugman y darle un pequeño apretón en muestra de apoyo y cariño-

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-¡Oye, Mugman! ¡Mira lo que dibuje! -Dijo el joven de morado, alzando el dibujo hacia el nombrado-

Mugman no pudo caber de la sorpresa. En el dibujo estaba él, agarrando de la mano a Cuphead a un lado suyo; estaba muy bien hecho y no pudo evitar sentir felicidad

-¿P-porque me dibujaste con Cuphead?

-¡Por que pienso que se llevaran bastante bien una vez se conozcan! -Sonrio Manneter, hasta que pensó bien las palabras del azulino- Espera, ¿conoces a mi hermano?