-SEIS-

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Esa voz... No era Yoongi o alguna de mis compañeras de cuarto, así que con muchas dudas volteé a ver.

-Ley.- Fueron las únicas palabras que salieron de mi boca.

No sabía cómo reaccionar a eso.

¿Por que ella está aquí?

-¿Que haces aquí?.- Pregunto molesta, como de costumbre al parecer.

-Yo estudio aquí... ¿Y tú?.- Sentía un gran alivio por verla a salvo.

-Mierda.- Balbuceo por lo bajo, seguido de un montón de insultos que no voy a repetir y ni siquiera sabía de su existencia.

-¿Que sucede?.- Pregunté sin entender nada, al perecer eso también se volvería normal.

-Alejate de mi.- Ahora dirigió su mirada directamente a mis ojos y hablo con completa seriedad.- Si me ves aquí, corre a otra parte. Evita mi existencia a toda costa. No te acerques a mis viejos "Amigos".- ¿Ella tiene amigos?. - Y por ninguna razón hables de lo que pasó esa noche...-

La vi alejarse luego de eso, ya me había quedado sin palabras, no sabía cómo explicar que uno de mis amigos sabe todo.

Pensado un poco más... Es Tae, nada malo puede salir de el.

¿Quienes son sus amigos?

¿Por que tengo que evitarla?

Muchas preguntas para un solo día.

-¿Dónde estabas idiota?.- Salí de mis pensamientos al ver como Sun me gritaba al final del pasillo.

Automáticamente recordé que ellas estaban esperando por mi. Sun y yo caminamos en incómodo silencio hasta el auto de KinGi, en su mirada se podía notar que quería asesinarme.

-¿Que sucedió?.- Pregunto un tanto preocupada Lele. Esta no se notaba tan molesta.

-Tuve una conversación inesperada con una chica...- Contesté sin muchos detalles, pero solo eso bastó para escuchar el gran resoplido de odio por parte de Sun.

-Me sorprende que sigas con vida.- Bromeo KinGi al encender el motor, el viaje a casa fue un tanto difícil, las calles estaban llenas de autos y casi no se podía avanzar, por otro lado estaba la mirada clavada en el espejo retrovisor de Sun, esta me miraba a través de el.

No era una mirada amigable por si se lo preguntan...

Hasta que por fin llegamos, era bastante tarde así que decidimos hacer todo más rápido, apenas puse un pie en la casa, ya tenía la orden de correr a la tienda.

Eso siempre me alegraba, pero esta vez sería diferente, TaeHyung ocupaba el puesto nocturno por lo tanto no lo podría ver más en esa pequeña tienda.

Camine con desgano por las conocidas calles hasta llegar al destino, tenía la infantil idea de que el estaría ahí parado, con su absurdo videojuego... claramente no era así.

Había elegido poner a una chica en su lugar, ella solo estaba ahi, sin hacer nada que llamará mi atención.

Salí de la tienda con todas mis bolsas pesadas, hasta que sentí que una de ellas era tomada por la fuerza.

-¡No, suelta!.- Grite sin ver al ladrón, por alguna razón este comenzó a reír, un tanto asustada por la locura del tipo, gire mi cuello para verlo.

Todo volvió a ser feliz.

-¡TaeHyung!.- Grite ahora feliz, quizás solo fue un impulso o la necesidad de hablar con alguien, pero sin pensarlo salte a su cuello para abrazarlo, me congelé cuando entendí lo que estaba haciendo, este solo siguió mi acto tranquilo.

-Solo Resultados- /BTS/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora