Se encontraba buscando a sus amigos por todo el Arcade. Dylan le había invitado a salir una vez más pero ahora con compañía de su hermana, la cual logró ver luego de un tiempo de buscarlos entre algunas personas que habían ahí; el lugar no estaba tan lleno realmente pero a ella si considerando que odia estar entre muchas personas.
-¡Ahí está!- Logró escuchar a la chica antes de que tomará el brazo de su hermano y lo trajera en dirección a ella.
-Oh, no puede ser.
-Oh, si puede ser. Te dije que me agradaba esta chica, sabía que había algo bueno en ella.-Gio miró a ambos inclinando su cabeza a un lado sin comprender lo que ellos decían.
-¿De que hablan?
-Tu camisa. Ella los ama.
-Si y ahora a ti más que a mi hermano, a el no les gustan.- Dijo mirando a su hermano enseñándole su lengua para luego tomar el brazo de Gio.- Ven encontré un juego muy divertido.
Dicho esto la menor de todos jaló el brazo a Gio llevándola a tal juego, era un juego de baloncesto. "Quién tenga más puntos gana" dijo ella comenzando con su primera partida al final de todo quién ganó fue Dylan y su hermana se excusó diciendo que era más fácil para el ya que era el más alto, ciertamente. Pasaron cerca de el lugar para retirar los premios y Gio logró ver un gran peluche de un gris gatito y se quedó prácticamente babeando al verlo, Dylan pudo notarlo y se posicionó a su lado.
-¿Lo quieres? Lo puedo ganar para ti.
-Pero... son muchos tickets.- El más alto alzó sus hombros comenzando a caminar hacía la siguiente máquina.-Espera, no tienes que...- El ya se había ido.
Pasaron al menos dos horas jugando tratando de conseguir los tickets suficientes, bueno más bien el porque se negaba a recibir ayuda de alguna de las dos chicas. Cuando ya tubo los tickets necesario fueron a reclamar su premio.
-Debes gustarle mucho a mi hermano. Nunca ha ganado un premio para mi. ¡Yo, su hermana!-Dijo esto último con mucho dramatismo llevando su mano a su pecho fungiendo sentirse ofendida.
-Es porque tu no eres tan especial como ella.- Dijo este entregando su regalo a Gio.
-¡Hey eso dolió!- Reclamó su hermana "golpeando" el estomago de su hermano mayor el cual no le hacía mínimo efecto esto.
-Gracias, por el regalo.
-No hay de que. ¿Quieren tomar algo?-Ambas asintieron entusiasmadas.
....
-Gio ¿Me puedes dar tu número? Me haz agradado.- Mencionó la menor sacando su celular para agendarla.
-¡Hey espera! Ni siquiera yo tengo su número. Yo lo quiero primero.- Dijo el mayor de todos haciendo un puchero.
-Infantil.
-Roba amistades.
-No tengo la culpa de ser más encantadora de tú.-Esto último hizo que Gio soltara una risa seguida de las del par de hermanos.
-Vale, ambos lo tendrán.- Dijo pidiendo el celular de ambos para agendarse por si sola.
-Algún día debes venir a nuestra noche de películas.
-¿Piensas cambiarme?-Preguntó el.
-Talvez, ella si me agrada.
-¿Noche de películas?
-Mi hermano y yo vemos una película cada viernes por la noche. Pero estoy pensando seriamente en cambiarlo por ti.
-¿Estas conciente de que es mía y no tuya?- volvió a preguntar alzando una ceja a su hermana menor.
-Ni siquiera es tuya. ¿O son novios?.- Dijo copiando la acción de su hermano y luego hacer un gesto de disgusto.
-Tal vez si... Ya es tarde debo entrar a casa.- Dijo divertida antes de alzar su mano en modo de despedida dejando a ambos con una expresión confusa en el rostro de ambos.
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Opportunity
Teen FictionEs increíble como alguien puede cambiar tu vida. Así es el amor.