― [29] ; veintinueve

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EDITADO 18/04/2015

¿Cuánto tiempo exactamente me había quedado observándolo sin siquiera saludarlo? ¿Dos segundos? ¿Cinco minutos? ¿Tres horas? ¿Dos semanas?

—¿Y? —Inquirió. —¿No vas a saludarme?

Abrí mi boca varias veces en un intento de decir algo pero no podía. Mi propia conciencia me jugaba malas pasadas. Melena castaña.

—Hola —logré decir.

—¿Y esa es forma de saludarme? —Rió acercándose. —Hola —sonrió, dándome un pequeño beso. —Ven conmigo a la habitación y luego bajamos juntos, ¿si?

—Uhm —murmuré. —Te espero abajo —corrí desapareciendo de su vista.

¿Esto era pura coincidencia, no? Sí, debía de ser. No voy a desquiciarme por una simple tintura de pelo. Él se tiñe el cabello todo el tiempo. ¿Por qué iba a molestarme sólo esta vez? No significaba nada. Sólo es una casualidad. Sí.

—¿Dev? —Preguntó Ashton.

—Oh —dije sacudiendo la cabeza. Me había hundido en mis pensamientos. —Hola Ash —sonreí.

—¿Cómo te fue con tu amiga? —Preguntó. Me senté en el sillón y suspiré disimuladamente.

—Bien —sonreí.

—¿Vamos a la playa? —Preguntó Ed.

Los chicos estaban jugando en el mar, pero yo no quería ir. Las razones 1) no quería andar en bikini en frente de los chicos, 2) el agua debía estar fría, 3) Michael. Creo que debí haber puesto a Michael cómo la primera razón por la que no quería meterme al mar.

Ni siquiera yo me entendía a mi misma. Él y yo no somos algo oficial, o por lo menos es lo que yo creo ya que en ningún momento me propuso ser la novia, o algo qué le diera un nombre al tipo de relación que llevábamos, por lo tanto el podía hacer lo que quisiese, ¿no? Pero, ¿por qué me molestaba tanto el hecho de que así fuera? En todo caso, si de verdad teníamos ese tipo de relación, yo también podía hacer lo que quisiera, ¿o no? Sin embargo, me sentía demasiado atraída por él cómo para liarme con otra persona. De solamente pensarlo me dan náuseas. Yo quiero a Michael, y sabía que no sería capaz de fijarme en otra persona. No creo que esté enamorada de él, pero estoy empezando a estarlo. Y me encantaría saber si él sentirá lo mismo en este momento. Sigo recordando el día en que habíamos establecido que lo intentaríamos, aunque sea. Recuerdo que me había auto-advertido de que estando con Mike, estaría arriesgándome a un muy posible corazón roto, pero las ganas de sentir lo que fuese que Michael fuese a darme fueron mayores.

Sin quererlo, me quedé dormida.

—Hey. Hey, Dev, despierta.

Abrí los ojos y parpadeé unas cuentas veces. Luke estaba frente a mí, mojado y sonriente. Me incorporé en la reposera y me quité los lentes de sol. El cielo estaba teñido de una mezcla entre naranja, rosa y violeta, ya estaba anocheciendo.

—Es increíble —sonrío Luke. —Vinimos todos a la playa y tú te quedaste dormida toda la tarde. Te digo que pensamos en cargarte y tirarte al agua para despertarte, pero después creímos que podrías morir ahogada si lo hacíamos, por lo tanto te salvaste.

—Wow. —susurré. —Qué lindos amigos y hermano tengo —sonreí sarcásticamente. —¿Qué hora es?

—Cómo las seis y media. Vamos, los chicos ya están en la casa —me tendió su mano. La tomé y me levanté de ahí. Estaba dormida todavía, y torpemente tomé mis cosas y caminamos hacia la casa.

—Hola, bella durmiente Dev. ¿El beso de tu príncipe azul Luke sirvió para despertarte de tu sueño eterno? —Preguntó Ashton una vez hubimos llegado a la casa.

FUCKING AND PERFECT YOU; mgc #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora