BRENDHA

"CERTEZAS PERDIDAS"

Me tomó con tal pasión que sentí que perdía autonomia absoluta de mi voluntad.
Sentía que con sus besos intentaba disculparse por esas lágrimas que me causaba su amor.

Sujetaba mi rostro, lo acariciaba, lo poseia como si la intension fuera claramente fundirse en mis labios. 

La efusividad de su cuerpo hizo que gran parte de los documentos sobre la mesa, cayeran al suelo desparramandose por toda la oficina.

- Levent... [dije mientras mis labios prisioneros de sus besos humedos intentaban balbucear palabras]. Estamos desorganizando todo el escritorio!

Casi como cayendo a la realidad se detuvo, miro hacia nuestro alrededor y dijo... - Tienes razón, que imprudente soy. Perdón.

No pensé que su reacción fuera disculparse, creo que sin intención alguna hice que se avergonzara. comenzamos a ordenar la oficina, y no perdíamos la oportunidad de cruzar nuestras miradas y besarnos una y otra vez.

Nos sentamos en el sillón y mientras acariciaba mi cabello ya despeinado, dijo nostalgicamente...

-Aún no comprendo cómo es que volviste a mí, por qué después de tantos años... 

[ ciertamente pensábamos lo mismo]

-Es cierto [continué]  han pasado seguramente muchas cosas en el medio, bueno creo que de eso se trata la vida ¿No?, no podemos perder el asombro...

Nos continuamos abrazando,  y claramente perdimos la noción del tiempo, que para nosotros se había detenido en el preciso instante en que esa persiana cubrió la ventana.

-¿Estoy ansiosa de que me platiques que fue de tu vida, como transcurriste estos años, cómo alcanzaste este nivel de profesionalismo, de entereza en la vida. Quiero saber mas de ti Levent [dije seguramente con la mayor intención de ser entrometida]

Sin emitir palabra alguna bajo su rostro y senti que no fue un buen comentario el mio.

De repente tocan la puerta del despacho.

[...]
-¿Estás en tu despacho?...

Era una voz delicada, que no reconocía entre los que trabajaban en la empresa. ¿Quién podría ser? 

[...]
-Levent, respondeme!.

-¿Cómo?.. ¿Levent?. ¿A caso te llamó por tu nombre? Decía yo en voz baja observándolo fijamente, mientras Levent se veía pálido y casi desconcertado.

[...]
-Levent!! Los empleados me dijeron que no te vieron salir del despacho. Ábreme, deja de jugar. Vamos!

Me sorprendió ver como Levent miraba hacia el suelo, sin decir una sola palabra. Tomé coraje y dije fríamente...

-¿A caso la dejaras esperando?... Debes abrirle.[Ordené determinante]

Cómo obligado a salir de su estado imberbe me vio fijamente a los ojos y con una clara expresión de culpa me dijo:

- Lo siento, abriré. [Contestó resignado]

No quería armar en mi mente ideas que claramente cualquier mujer en la tierra pensaría... Bloquee mi cerebro y sin que Levent lo notara me escabullí hacia el baño.

[...]
-Era hora que abrieras!! ¿Por qué me hiciste esperar tanto?!!  [Decía una voz quejosa y muy aguda por cierto, reprochando con una evidente confianza hacia el].

Levent:
-Disculpa Tifany... estábamos..

Tifany:
-Estábamos? Quienes?

Levent:
-¿Cómo..?
[Volteó y notó que yo no estaba. Por supuesto habrá entendido que no me resultaba simpático el que me presentara ante esa tal "Tifany" bajo estas condiciones].

Levent:
Quise decir, que estaba en el baño preparándome para salir. ¿Qué haces aquí? No me avisaste que regresarías de Londres.

Tifany:
¿¿Avisar?? ¿Por qué debería hacerlo? ¿A caso te arruino algún plan personal? jajaja
No te imagino enamorando a tus empleaditas!!
[Frunciendo el ceño y por caballerosidad, Levent se tragó sus palabras]

Tifany:
- Así que tienes un baño privado, he? dejame verlo. [Continuó insistente]

Quería desaparecer!! venía hacia mi!! No hay forma que no me descubra! Que horror.
¿Qué voy a decir si me ve aquí? [Pensaba mientras el corazón no paraba de saltar en mi pecho].

[Levent se lanzo sobre Tifany e interponiéndose entre ella y la puerta dijo]

-Tiff, por favor estoy exahusto. vámonos ahora, si?

[¿QUÉ? ¿¿"TIFF"?? Me enojé a tal extremo que de tanto apretar los dientes casi me como la lengua!!]

Tifany:
-Está bien, pero otro día me lo muestras, ok? [dijo en tono aniñado]

En silencio observé como la puerta se cerraba dejándome atrás.
No sabía como reaccionar.
¿A caso poseo algún derecho sobre el?. Jamás hablamos de ser novios.
Si me detengo a pensarlo un minuto, no sé nada sobre el.
Si tiene padres, hermanos... ¿NOVIA?
Por más apasionante que haya sido ese beso, por más ardientes que me resultaran sus brazos rodeándome... Nada me habilitaba a sentirme con algún título en su vida.