La desicion

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Capítulo 8

Me despertó el sonido de la ducha. Edward no estaba a mi lado, así que supongo que él era quien se estaba bañando. A pesar de haber dormido más de 8 horas, siento el cuerpo entumecido y cansado. Ayer pasamos el susto de nuestra vida, las heridas sanarían y desaparearían con el tiempo pero el trauma que me quedo quizá no se vaya nunca, pero con la ayuda de Edward saldría adelante. Ayer cuando Edward me toco, me sentí la mujer más hermosa del mundo. Me sentí adorada y protegida entre sus brazos.

Ahora solamente tenía una sábana delgada cubriéndome el cuerpo, por lo que tome la frazada y me cubrí entera, tapándome hasta la cabeza. Solo se me veian los ojos. Mi ropa se encontraba muy lejos. Me daría vergüenza que Edward me encontrara desnuda mientras buscaba mi ropa. Voy a tener que esperar a que Edward vuelva para que me ayude y me pase la ropa.

Edward luego de unos minutos salió del baño con un jeans que le quedaban más o menos grandes. Venia secándose el pelo con una toalla y sin camisa. Los moretones gracias a la pomada no eran tan notorios.

-Bella mi amor, te desperté?-me dijo preocupado pero ocultándose una risa

-Si, pero no te preocupes. ¿Qué es lo gracioso si se puede saber?

-Pareces una oruga, mi amor. Solo se te ven tus ojos.

-Bueno la oruga quiere salir del capullo pero para eso necesita que me pases el piyama que tenía ayer junto con mi ropa interior, por favor

Edward recogió las prendas del suelo y el las dejo en la esquina de la cama.

-Pero con una condición, dame un beso.

-Acércate.

-No pequeña ven tu para acá.-con una sonrisa de pícaro

Trate de quitarle mi ropa pero él era mucho más rápido y ágil que yo. Finalmente cedi

Con mucho cuidado tome la frazada para tratar de cubrirme el cuerpo. Llegue a donde estaba Edward y me pare sobre mis rodillas para quedar a su altura. Rápidamente junte nuestros cuerpos y solté la sabana para pasar mis brazos por su cuello. La sabana se sostenía por nuestros pechos unidos y solo me cubría desde mi espalda baja a mi trasero dejando mi espalda en su totalidad expuesta donde Edward me rodeaba con sus brazos. Sus manos sobre mi piel, me causaban escalofríos.

Acercamos nuestros labios. Cada beso era mejor que el anterior. Cada beso me dejaba sin aliento. Pero este en especial me tenía un poco excitada, recordando lo de ayer. Dejamos el beso y coloque mi cabeza en su pecho sobre su corazón. El me acariciaba mi pelo y mi espalda baja.

-Tus hematomas y tu herida está mucho mejor, esa pomada hace milagros.

-Tus heridas también están bien-

-hee Bella tengo algo que decirte

-mmm..

- vas a tener que usar una bufanda o quizá Pablo o Claudio tengan algo con que taparte el cuello.- me dijo nervioso pasando sus manos por su pelo.

-Edward que hiciste?

-Quizá con la pasión de ayer, me emocione mucho y sin querer queriendo te deje un chupón en tu cuello

-EDWARD¡¡¡, me puse una polera rápidamente, me tapaba hasta la parte superior de mis muslos. Y corrí al baño a verlo en el espejo. Tenía en mi cuello tres chupones, a falta de uno.

-Tienes suerte que mi familia no vuelve hasta dentro de dos días. En mi bolso tengo base de maquillaje, me lo traes.

Edward me la entrego y permaneció en mi espalda abrazándome por la cintura con su cara en mi hombro mientras yo me maquillaba y ocultaba los chupones de nuestra noche

Mi destino eres tu(fanfic Crepusculo/twilight )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora