Las aventuras yuri de Lucy y Erza 2

Extra 2: Lucy x Wendy

La amo, no puedo decir más. Amo a esa niña, la niña que robó mi corazón. Yo...amo a Wendy Marvell.

Soy Lucy Heartfilia y desde hace varios meses siento algo intenso por Wendy, pero hay un gran problema, ella tiene 12 años y yo tengo 17. Soy como una hermana para ella, pero yo siento algo más por ella.

Pronto, sería mi cumpleaños y esperaba celebrar una fiesta en mi casa, pero todos mis amigos tenían otras cosas que hacer...

-No te preocupes Lucy-san-dijo Wendy-Yo si que iré a tu fiesta.

Me alegré un montón y la abracé fuertemente.

-¡Ahh! ¡Qué mona eres!-grité de alegría.

Quizás esto sea una señal, si está ella sola conmigo, tal vez pueda decirle que la amo, pero igual se asusta y malinterpreta mis palabras.

-Pero no sé que regalarte, Lucy-san-dijo Wendy.

Vaya, eso es un problema, pero antes de que dijera nada, Erza y Mira la acompañaron a comprar algo, yo no fui porque quería sorpresa. Sé que no va a ser el cumple que esperaba, pero al menos estará mi amada Wendy allí.

Mientras esperaba el día de mi cumpleaños, pensaba en Wendy, en esa delicada flor aún por desarrollarse que me atraía tanto y hacía que me latiese fuerte el corazón.

Llegó el día de mi cumpleaños y había preparado la casa para la ocasión, no es haya preparado un momento romántico, no, solamente decoré la casa con gorros de fiesta, serpentinas y globos.

Al llamar a la puerta, vi como Wendy venía cargada con un montón de bolsas y yo la ayudé.

-¿Qué es todo esto?-pregunté.

-Los regalos de los demás-respondió Wendy-No han venido, pero no querían dejarte sin regalos.

-Pobre, has tenido que cargar con todo,¿no?

-Bueno, Mira-san me ayudó la mitad del trayecto. No podía cargarlo todo yo sola.

-Ya, eso es normal-dije y la dejé pasar.

Ella entró en casa, se sentó en el suelo y sacó la tarta que hizo Mira. Era normal que la tarta la hubiese hecho ella, ya que ella cocina muy bien.

-Siento que solo seamos dos-dije.

-No importa, Lucy-san, mientras que no divirtamos.

-Dalo por hecho-dije y la miré un poco lujuriosa.

Para Lucy, no puedes mirarla lascivamente, es un niña y no quieres que te acusen de pedofilia,¿verdad? Por el momento, vamos a disfrutar las dos juntas mi cumpleaños.

-Ya eres mayor de edad,¿eh Lucy-san?

-Si, me siento mayor.

-Bueno, aún eres joven, ojalá llegue yo a los 18...

-Llegarás, pero aún te queda el resto de tu niñez...

No dijimos nada más y empezamos la fiesta, abría los regalos de mis amigos, soplé las velas y fue entonces cuando recibí el regalo de Wendy.

-No es gran cosa, espero que te guste...

Cuando abrí el regalo, vi que era un bonito broche.

-Es...es precioso-titubeé.

-Gracias, Mira y Erza me ayudaron a elegirlo.

Mi corazón empezó a latir fuertemente, cada vez me gustaba más. No pude reprimir mis emociones y agarrando a Wendy del cuello, la besé en los labios.

Cuando me percaté de lo que estaba haciendo, me aparté de ella y la pedí disculpas. ¿Qué acabo de hacer? Ahora soy adulta y podría ir a la cárcel por forzar a una pobre niña.

-E...esto Wendy, yo...

Wendy no reaccionaba y pensé que todo esto era culpa mía. Dios, ahora me siento realmente mal por haberla besado así sin más. Lucy, eres tonta.

Se hizo bastante tarde y acompañé a Wendy a Fairy Hills, ella no formuló palabra alguna.

-Lo siento-dije con lágrimas en los ojos.

Llegué a casa y lloré por haber fastidiado mi oportunidad con Wendy y creo que también destrocé su inocencia al besarla sin previo aviso.

Me siento tan estúpida, por culpa de mi inseguridad siento que voy a ser regañada por el gremio por haber mancillado a Wendy.

Al día siguiente, fui al gremio con un poco de miedo, pero vi que todo seguía igual que siempre.

-Hombre, enhorabuena Lucy.

-¿P...por?-pregunté.

-Venga, no te hagas la tonta-bromeó Erza-Sabemos que ya te has lanzado con Wendy.

-Ah,¿que ya lo sabíais?

-Aquí no se escapa nada-sonrió Cana-Además, Wendy dijo algo sobre ti.

-¿Ah,si? ¿El qué?

-Qué te lo diga ella, está con el Maestro.

Fui al despacho del Maestro y cuando toqué la puerta, Wendy me recibió con un cordial abrazo.

-Hola Lucy-san, te he estado esperando.

-Wendy,¿como es que lo sabe todo el mundo?

-Porque se lo conté hace días. Lucy-san, sé que me amas y lo supe cuando te oí hablar sola diciendo que me amabas.

-Lo...lo siento.

-¿Por qué has de sentirlo?-preguntó el Maestro-¿Sientes haberte enamorado de ella?

-N...no, pa...para nada, es solo que...creí haber destruido su inocencia.

-Mientras no le hagas nada indecente, está bien.

-¡Loliconera!-gritaron Natsu, Gray y Erza con tono de burla.

-¡Dejadme en paz!-grité.

-Lucy-san...

-¿Si?

Wendy aprovechó el momento y me besó delante de todos, a pesar de todo, ella me ama y yo me siento muy feliz por ello.

-¿Quieres ser mi novia?-me preguntó Wendy con una sonrisa pícara

-Claro que si-respondí al instante y la besé nuevamente.

Esa noche, me la llevé a mi casa y cuando llegamos, ella me pidió que le hiciera nuevos peinados. Empecé a cepillarle y tocarle el pelo y le pedí a Cáncer que hiciera algunos peinados monos para ella. Hubo uno con trenzas, que me hizo abrazarla y gritarle que estaba monísima.

-Por cierto, te...tengo algo para ti-dijo ella tímidamente.

Al abrir la cajita, vi que había otro broche con forma de corazón que simbolizaba nuestro amor.

-Wendy-dije de repente.

-¿Si, Lucy-san?

-¿No te sientes rara al salir con alguien mayor?

-Un poco, pero creo que me acostumbraré, a fin de cuentas eres mi novia y te amo.

-Cierto, que importa la edad, si dos personas se aman, tienen que estar juntas.

No dijimos mucho más, ya que ella me cogió de la mano y me dijo que quería ir a cenar fuera.

-Lucy-san, cuando sea mayor, haremos el amor,¿cierto?

-No pierdas tu inocencia tan rápido, Wendy, pero si, cuando tengas 18, haremos el amor. Pienso esperar hasta ese momento.

Wendy me abrazó de nuevo y yo le toqué el pelo.

-Wendy, estaré a tu lado por siempre...