19. Instituto más idiota.

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Caminaba por los diversos pasillos del instituto que para mi sorpresa era enormemente gigantesco, y desventaja, NO conocía a nadie. La gente me miraba, quizás por mi color de pelo o simplemente me reconocieran de la banda, habían miradas asesinas y otras simplemente de dejar pasar como si nada.

–Ella es la señorita Christine, será nueva este curso, por favor señorita. – La profesora me dio paso y sonreí mientras caminaba al frente de la clase.

–Como ya saben mi nombre es Christine, pero me pueden llamar Chris. – Abrí la boca para decir algo pero un chico castaño oscuro con aspecto bastante bien vestido habló.

–Todos te conocemos, ¿a caso no te echaron de LOL? – El chico rió y se recostó en la mesa. – Seguramente te echaron por ser tan F.E.A

–Me habrán echado por fea, o lo que tu creas, pero al menos yo no me creo tanto siendo tan poca cosa como tú. – Solté una risa triunfante y la profesora me ordenó sentarme.

La profesora explicaba matemáticas, pero no de la forma que deseaba, no entendía nada y da la casualidad que no he repasado en verano, ¿soy genial, no? Resoplé y tomé apuntes, había escogido mixtas, y aun que no era ni ciencias ni letras seguía siendo una mierda atender a clase. Yo solía sacar notas de un regular hasta un notable alto, pero lo que mejor se me da es música, asignatura que no sabía si se daba o no.

Receso.

Guardaba las cosas en mi respectiva taquilla hasta que aquel tipo que se burló de mí en clase de matemáticas abre su supuesta taquilla al lado izquierdo de la mía. ¿Por qué al lado de este imbécil? Cerré con fuerza la taquilla e hice intento de irme pero alguien haló de mi brazo y me acorraló.

–¿Qué quieres, idiota? – Pregunté molesta mientras le miraba fijamente.

–Por donde empiezo… – Murmuró mirando hacia otro lado. – Ah, sí, deberías tener cuidado con quien te metes princesita.

–Que yo sepa no me he metido en ningún lado.

–Es una advertencia… – Se acercó peligrosamente a mí y yo observaba descaradamente sus labios. – Mi nombre es Sean. – Susurró en mi oído antes de irse por el pasillo.

–¿Qué, fue eso? – Me susurré mientras lazaba un suspiro, el corazón estaba golpeando con fuerza mi pecho, y no paraba de repetirme. ‹‹ Quédate quieto, solo debes latir por Luke y por nadie más. ››

(…)

Las clases fueron abrumadoramente aburridas y no había hecho amigos ni siquiera del sexo opuesto al mío, creo que me odiaban por dejar… ¡No, no mereces recordarlo! Yo elegí esta opción y es la que voy a seguir aun que me cueste concentrarme. Aun que tenga que aguantar a ese idiota de Sean.

Llegué a casa hecha polvo, mi madre me sonreía demasiado y yo no entendía, dejé bruscamente la mochila en la silla y ella me seguía sonriendo extraño.

–Mamá… ¿te pasa algo? – Alcé una ceja algo preocupada y ella negó y se retocó el pelo.

–Oh, no, cariño, nada. – Rió nerviosa. – Tu padre vendrá temprano hoy…

–Ah… – Desde que llegué no había visto a mi padre, creo que ni siquiera sabía que estaba aquí. Mamá esta sonriente desde que llegué, Calvin había crecido y me parecía bastante lindo… Pero mi padre era el que debe de estar feliz de que dejase ese sueño estúpido de la música.

Subí a mi habitación a hacer los deberes restantes que me quedaron por hacer, seguido me cambié con la típica ropa que llevaría una chica que vive en una casa enorme y que tiene dos padres que reciben un sueldo todos los meses. Un vestido liso suelto y unos tacones, no estaba cómoda pero si mi padre venía a cenar tenía que estar presentable para él, me gustara o no.

Way of looking. || L.R.H       [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora