27. Cortemos.

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Solo recuerdo haber visto su cara, desgarrada y acusadora, vi esas letras gigantes en color rojo sangre “zorra”. Escuché la risa de una rubia que estaba a su lado y el golpe seco de mis rodillas tocando el suelo. La gente me intentaba matar con la mirada, algunos me golpeaban y otros simplemente me manoseaban. Vi como las lágrimas me quemaban las mejillas y como no paraban. Escuché el traqueteo de unos tacones de mí, y su risa, como si disfrutara.

–¿Quieres más, perra? – Me haló del pelo haciendo que la mirara, era ella, la plástica de la clase de música. – ¿Piensas jugar con todos los chicos del instituto como con Sean? Pues déjame decirte que aquí quien juega acaba perdiendo. –  Sentí algo arder en mi mejilla, esta vez no eran las lágrimas, era algo peor, una mano enmarcada y de color rojo en mi mejilla. Intentó golpearme de nuevo pero algo la retuvo, levanté la vista temerosa de volver a ser golpeada, pero vi sus ojos azules y profundos como el mar. ¿Qué hace aquí?

–Ella no tiene la culpa. – Dijo serio mientras apartaba con fuerza la mano de la chica. – A ella no le gusto, ella no se merece esto. – Agarró el poster y lo arrugó, miró a Sean y le dedicó una mirada de las que matan. Me tendió la mano y halo de ésta hasta un sitio más solitario. ¿Por qué me defiende él y no Sean? – ¿Por qué te dejas golpear por esa mal nacida? ¡¿Por qué no haces nada?! ¡¿Por qué siempre te callas todo?! – Chilló soltándome y mirándome con los ojos rojos.

–Le he traicionado ,Luke ,y toda el instituto lo sabe. – Me dolía el pecho, creo que era como si me asfixiara como si me estuviese ahogando.

–¡Encima ese cabrón ni te defiende! Entiendo que ahora se cabree contigo pero… – Apoyé mi mano en su pecho y giré la cabeza para verle a él, con su respiración agitada y mirándome sorprendido.

–Por favor… Quiero hablar con él. – Le dije a Luke yendo donde Sean.

–¡Chris! ¡Chris! – Chillaba, gruñó y golpeó una taquilla hasta el punto de aboyarla.

Sean no me miraba, tal vez le daba miedo ver el moretón del golpe o simplemente vergüenza de haber salido con una chica como yo, una chica tonta que creyó en que los ojos lo decían todo.

–Así que… Es verdad lo del poster… – Suspiró parando en seco. Agaché la cabeza y asentí, se giró a verme, una expresión desastrosa, la había cagado. Rió cínico y se estrujó el pelo. – ¿Por qué me haces esto, Chris? ¿No soy tan bueno como, Luke o ese tal Jacke? – Señaló al final del pasillo y yo no pude evitar llorar de nuevo. – ¡Contesta! – Chilló en mi cara mientras agarraba con fuerza mis hombros.

–¡Tu eres mejor que cualquier chico que haya conocido! ¡Mereces a alguien que no sea yo! – Grité frustrada y casi ahogándome con mi propia saliva, me ahogaba, ahogaba con mis propias palabras, me dolía la garganta por culpa de un nudo de sentimientos y lágrimas.

–¡El problema es que yo te quiero a ti, Chris! – Se separó bruscamente y se puso de cuclillas en el suelo. – Yo te amo… Pero ahora… – Entendía esta sensación, entendía como podía llegar a sentirse una persona que está destrozada, debería dejarlo, quiero que sea libre, quiero que encuentre a alguien mejor.

–Cortemos, Sean. – Susurré poniéndome a su altura. Él me observó. – Cortemos… – Sonreí y limpié mis lágrimas. – Yo… No te merezco. Lo siento. – Me levanté y acaricié su cabello por última vez, no olvidaría sus besos, sus abrazos, sus tonterías, su sonrisa, su risa… Ahora me daba cuenta que aun que doliera, prefería sufrir yo a él.

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N: ¿Qué les va pareciendo?

Les aviso de antemano que esto tendrá posiblemente segunda parte .__.

¿Qué bien, no?

Jajjaa.

Votos & comentarios.

Besooos. ^^

Way of looking. || L.R.H       [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora