Acostumbrarse.

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Me acostumbré,

Me acostumbré a tu esencia,

A tu bonita diligencia,

A tu Santa y bendita paciencia,

Me acostumbré,

Me acostumbré a tus sentidos,

Del humor, de oídos,

A tu tacto y sonido,

Me acostumbré,

Me acostumbré a tu boca,

A tu cuerpo, a tu ser,

Lo hice mío, lo deje ser,

Al ser mío lo vi crecer,

Madurar, envejecer;

Y yo con él,

Feliz y amado me acostumbré,

A ti, a tus latidos,

A tu corazón ruidoso,

A tus quejas y ruidos,

A tus sentidos,

Con eso yo me quedé,

Me acostumbré tanto que te amé,

Luego de eso... te perdí,

Y ahora... yo también ando perdido,

De tanto amar,

De tanto ruido,

Ensordecedor,

"Mi cabeza da vueltas",

Ensordecedor sonido,

Del que nunca debí despertar,

Me acostumbré y me acostumbré,

Hasta el punto que ya ni escuché,

Los amores venían y venían,

Tocaban a mi puerta,

Pero yo egoísta;

Repetía en mi memoria:

__Ella, ella es mi historia, la más pura y bonita,

Y aunque bien ya no esté, Me niego a olvidarla,

Por que volver a amar significa enterrarla,

Y eso para mí sería súper doloroso,

Así que mi amor por ti no cambia.

No es No y; *cerré la puerta*

Ya nadie pasa por mi lado,

Ya nadie me manda correspondencia,
O

eres tú o nada,

O eres tú o nada,

O eres tú (Mi amada) o nada.


Poesía MelódicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora